El escándalo de corrupción que golpea a Petrobras en el marco de un fuerte deterioro de la economía de Brasil incrementó el riesgo de los activos de la petrolera de tal manera que ahora son más riesgosos que los bonos de YPF, pese a que su calificación crediticia está cinco niveles por debajo de su homóloga brasileña.
Incluso la reciente ola de ventas que sufrieron los activos argentinos por la resolución de la Comisión Nacional de Valores, que obliga a los Fondos Comunes de Inversión a valuar al tipo de cambio oficial los activos en moneda extranjera, no pudo acortar las diferencias entre los títulos que ambas compañías tienen con vencimiento en 2024.
Los rendimientos de los bonos de YPF subieron desde 9,45% a 10,2% esta semana, pero los títulos de Petrobras se encarecieron desde 10,49% a 12,15% en el mismo período. De acuerdo a la agencia Bloomberg, hace un año esta diferencia se daba al revés: los bonos de YPF rendían 3 puntos porcentuales más.
Es que el productor de petróleo braileño, que es el más endeudado del mundo, sufrió un fuerte golpe a principios de este mes cuando perdió su grado de inversión por parte de Standard and Poors, luego de que Moodys la rebajara la nota en febrero. Incluso la agencia de riesgo califica a Petrobras en Ba2, cinco niveles por encima de YPF.
Según Bloomberg, la compañía brasileña, que tiene u$s 56.000 millones de títulos en circulación, vio sus bonos caer a mínimos históricos el martes mientras que la caída en los commodities profundizó el pesimismo sobre la compañía, que está envuelta en el escándalo de corrupción más grande del país.
«La ola de ventas de Petrobras se debe a que la empresa fue degradada, como Brasil, y hay una venta masiva de inversores que quieren minimizar su exposición», dijo a Bloomberg Danilo Onorino, gerente de cartera de Dogma Capital con sede en Lugano, Suiza, que tiene bonos de Petrobras.
Por otro lado, el perfil de YPF se está beneficiando del año electoral, que promete cambios estructurales para la economía una vez que asuma el próximo gobierno.