El grupo ARX Arcillex inauguró en la localidad bonaerense José L. Suárez, una planta de producción de combustible sólido recuperado, la primera en su tipo que produce a gran escala en la Argentina. El establecimiento, en el que se invirtieron $ 50 millones, permite disminuir residuos en rellenos sanitarios, sustituir combustibles fósiles por una fuente ambientalmente segura y paliar el déficit energético nacional. La tecnología fue adecuada en conjunto con la Universidad Nacional de General Sarmiento. Es también la planta más grande de América del Sur en producción a gran escala de combustible sólido recuperado. Tiene capacidad para producir 150 toneladas/día, equivalentes a 75.000 m3/día de gas natural, volumen que puede abastecer el consumo de más 5.000 hogares de familia tipo. Según la compañía, la operación de la planta, «contribuye a la sustentabilidad ambiental de su zona de influencia dado que permite disminuir los volúmenes de residuos dispuestos en los rellenos sanitarios y concurre a paliar el déficit energético nacional». Durante el acto inaugural de la planta, al que asistieron funcionarios nacionales y provinciales, el gerente de Asuntos Ambientales de ARX Arcillex, Fernando Lorenzo, destacó la «reconversión de la empresa, de más de 60 años, que habiendo sido una industria dedicada a la minería y a la elaboración de materiales para la construcción basados en el mineral extraído, aprovechó su recurso espacial para destinarlo al saneamiento ambiental, Ahora se incorpora a la producción de energía renovable mediante el tratamiento de residuos sólidos urbanos». Su producción inicial se destinará a abastecer la demanda energética de su planta de materiales para la construcción y a la provisión de energía para la cementera Loma Negra.