La actividad minera en Córdoba alcanza en la actualidad marcas históricas. Nunca en el pasado se consumieron tantos agregados pétreos como en los últimos 16 meses.
El gran salto de incremento productivo se produjo en 2016, que midió casi un 30 por ciento más que en 2015, y en 2017, un 10 por ciento sobre el año inmediato anterior.
También se observa un incremento en el primer trimestre de 2018. No es para menos: el 95 por ciento de las obras en construcción (rutas, viaductos, puentes o desarrollos urbanísticos) están hechas de piedra: cemento, cal, pintura, arena, cerámica, vidrios o limo. Todo es minería.
En forma simultánea, esta actividad trae consigo trabajo e inversión. En los últimos 12 meses, se crearon alrededor de 500 puestos de trabajo y la inversión por todo concepto fue cercana a los 55 millones de dólares.
Córdoba es importante, especialmente en la actividad ligada a la construcción. Si se la mide en producción por persona/día, es la más alta del país, con 32 kilos, cuando el promedio argentino es de 12 kilos.
La minería cordobesa entrega al país el 30 por ciento de los minerales industriales, como cuarzo, feldespato, micas, carbonatos y arcillas a la industria del vidrio, cerámica, papel, pinturas, plásticos, caucho y el 40 por ciento de los agregados gruesos para la construcción.
No hay que olvidar, además, que la minería surte al sector agrícola ganadero los minerales que hay que reponer en los suelos. No está demás acentuar que el primer productor minero argentino es el agro, con cinco millones de toneladas anuales de extracción de minerales en suelo.
La provincia contribuye mucho en ese aspecto, especialmente en la provisión de carbonatos cálcicos y magnésicos y en la industrialización de agregados con azufre.
El impacto regional es importante: hay localidades como Alta Gracia, La Calera, San Agustín, Las Caleras de Calamuchita y Las Playas, cuyos productos brutos en algunos casos son, en su mayoría, de origen minero.
En el territorio funcionan dos grandes plantas de corte y pulido de mármoles y granitos, situadas en la localidad de Villa de Soto. Y es una de las únicas que hoy produce fluorita en Argentina, mineral esencial en la industria. Además, tiene el único cluster argentino que crece a expensas de tres grandes sectores productivos, primarios y relacionados: el del petróleo, gas y minería.
La idea estatal es que se siga creciendo y que Córdoba provea al sector no sólo de minerales, sino que se puedan sustituir importaciones onerosas. Ambas minerías –la metalífera, tan importante en el país, y la no metalífera presente en la provincia– son las actividades primarias que más suministro de maquinarias y repuestos demandan.
Fuente: Secretaría de Minería de Córdoba
Comentarios: