La empresa petroquímica brasileña Braskem, de la Organización Odebrecht, anunció ayer la compra del 70,59% de Solvay Indupa que controlaba la belga Solvay por u$s 290 millones.
La operación incluye las plantas que Solvay Indupa controla en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, y en Santo André, San Pablo, en Brasil.
El grupo belga había decidido en febrero pasado poner en venta su filial local, en virtud de sus pérdidas, de $ 422 millones en 2012, y de una situación incierta, según consta en su balance anual (ver aparte).
Creada en 1948, Solvay Indupa tiene capacidad para producir 540.000 toneladas de PVC y 350.000 toneladas de soda cáustica. Una vez cerrada la operación, Braskem contará con una capacidad total de 1,25 millones de toneladas de PVC y 890.000 toneladas de soda anuales, consignó El Cronista.
De esta manera, Braskem, centrada en la producción de resinas termoplásticas, se consolidará con esta compra como el mayor grupo petroquímico de América latina. En la Argentina, en tanto, el líder de este sector seguirá siendo Dow Chemical.
Además, Braskem operará por primera vez instalaciones industriales en la Argentina, ya que hasta ahora y desde hace poco más de dos décadas sólo tenía oficinas comerciales. «Braskem compra desde hace años naftas a YPF, de la cual es su principal cliente corporativo del mundo, y exportar ese combustible a Brasil. Le vende a la Argentina en tanto resinas termoplásticas«, explicaron desde Odebrecht, un grupo diversificado privado y familiar brasileño, del cual Braskem es su brazo petroquímico.