El gigante grupo nacional Cartellone, una constructora de fuerte peso en la obra pública, comunicó que le vendió un 33% de sus acciones a Abrasur, dedicada a la inversión de energías renovables.
Hace un mes, Abrasur le había comprado a Impsa (de Pescarmona, en reestructuración) y Cartellone las acciones del Consorcio de Empresas Mendocinas para Potrerillos, una represa que opera en esa provincia, a la que le quedaban pocos años de concesión.
Cartellone se dedica a obras públicas de infraestructura, concesiones viales, generación de hidroelectricidad, transporte de energía, concesiones de distribuciones de gas y otras actividades de industria pesada.
A partir del plan de infraestructura del Gobierno, las empresas de construcción están de parabienes, después de un año -2016- donde la obra pública se detuvo para investigar la corrupción que existió en muchas adjudicaciones realizadas por el kirchnerismo en el poder.
La búsqueda de un socio suele caracterizar a las empresas cuando encaran un período de ajuste o de expansión. Abrasur es una empresa conformada por un grupo inversor enfocado en activos de Infraestructura y Energía Hidroeléctrica y Renovables en la República Argentina, junto a un grupo de reconocidos profesionales del sector.
Fuente: Diario de Cuyo