Desde diciembre del año pasado se viene generando un gran movimiento en los pasillos del Ministerio de Minería de San Juan. Diferentes abogados, quienes representan a empresas nacionales e internacionales, presentan escritos y piden información sobre antiguos yacimientos que se explotaban en la provincia de San Juan, que curiosamente no se encuentran en alta cordillera. Pero el interés no sólo procede del sector privado, ya que desde la Secretaría de Minería también están interesados en un grupo de yacimientos anteriormente explotados, como las famosas minas de Hualilán. “Actualmente no puedo brindar más información por una cuestión de secreto profesional y respeto a las demás empresas y a la Secretaría de Minería. Este fenómeno se genera debido a que el mercado minero se retrajo luego de Pascua Lama, y en mi opinión personal, las empresas se dieron cuenta que es mejor tener los huevos en diferentes canastas y no todos juntos en una sola”, explicó Marcelo Maidana, Secretario Técnico del Ministerio de Minería.
Y continuó: “Debemos tener en cuenta que hoy la tecnología permite aprovechar los recursos minerales que anteriormente se dejaban de lado porque no eran rentables. Proyectos como Hualilán y muchos otros no necesitan inversiones descomunales, estamos hablando de entre tres y cinco millones para poder trabajar. A su vez, no poseen más de 200 mil onzas de mineral. Sin embargo, de entrar nuevamente en funcionamiento se reactivaría un sector importante que generaría mano de obra.
Obviamente no va a producir miles de puestos de trabajo, pero tampoco podemos sentarnos a esperar que alguno de los mega proyectos metalíferos de alta cordillera entre en actividad para generarlos”.
A su vez, desde el Ministerio también informaron que la cantidad de empresas interesadas en los antiguos proyectos responden en un 50% a capitales extranjeros y el otro 50%, a capitales nacionales.
Uno de los factores determinantes en esta mirada al pasado para apostar al futuro extractivo de la provincia es que las vetas minerales de estas antiguas zonas todavía conservan riquezas. Maidana explicó que hasta hace algunos años atrás, ninguna empresa extranjera apostaba por invertir en proyectos cuyos recursos no superaran las 500 mil onzas.
Sin embargo, actualmente las compañías buscan generar ganancias con inversiones “pequeñas” y esto implica que los viejos centros mineros entren en valor. “Antiguamente la ley de una veta para ser explotada era de 18 gramos. Hoy en día, con la tecnología y la maquinaria existente se puede explotar una veta de 6 gramos o incluso de 2 gramos y ser totalmente rentable. Es por eso que estamos estudiando varios lugares donde se explotaba anteriormente para volver estos puntos zonas explotables”.
Este fenómeno de interés por los proyectos que no se encuentran en alta cordillera permite vaticinar una posible variable positiva para el 2017 en materia de exploración. “Es claro que ninguna mega empresa internacional va a venir a invertir en un proyecto de 150 mil onzas. Sin embargo, a nosotros como Estado si nos interesa, porque desde mí óptica, prefiero ver el vaso siempre medio lleno a verlo medio vacío. Son zonas que quizás con un año de trabajo pueden empezar a ser rentables”, concluyó Maidana.
La provincia de San Juan ha sido considerada históricamente como un gran polo para la minería nacional y continental. Desde antes de la época de Domingo Faustino Sarmiento que existen innumerable cantidad de minas que trabajaron en diferentes periodos explotando distintos minerales. A continuación, se detallan algunas de las más conocidas y que posiblemente sean foco de atención para el Ministerio de Minería y privados que buscan reactivar antiguas explotaciones.
Hualilán: s una antigua explotación de oro y plata que posee una ley mineral muy alta. Según los viejos registros, la ley común era de 4 a 15 onzas por cajón de 50 quintales. Se localiza en el departamento Ullum, al norte de la ciudad de San Juan.
Tontal: son minas de plata ubicadas a 144 kilómetros al oeste de la Ciudad de San Juan. Fueron descubiertas en 1860 y sus metales dominantes eran sulfuros, arseniuros y antimoniuros de plata, presentándose también sulfatos y carbonatos de plomo.
Castaño: la riqueza mineral de este centro minero fue descubierta en 1861 y se localizan a 86 kilómetros del Tontal. El antiguo yacimiento ubicado en el departamento Calingasta fue el primero en utilizar tecnología de avanzada y usar el proceso de lixiviación.
Huachi: es una antigua mina de oro, cobre y plata ubicada al norte del departamento Jáchal. A su vez, en las mismas serranías se encuentra el centro minero Las Tolas, uno de los yacimientos más antiguos de la provincia de San Juan.
Salado: son antiguas minas del departamento de Iglesia descubiertas en 1844 donde abundaba la plata. Ofrecían grandes concentraciones de cobre con beneficios de 25% al 65%, este yacimiento tuvo hornos activos para obtención de mineral.