Las compañías mineras expresaron su «satisfacción» por los resultados productivos y económicos que se lograron tras seis meses de vigencia de la quita de las retenciones a las exportaciones en el sector, y anticiparon que esa medida generará, este año, más de 3500 millones de dólares en ingresos para el país.
«La reducción total de los derechos de exportación para la minería generó competitividad para el sector, más vida útil para los proyectos y perspectivas para la realización de nuevas inversiones», aseguró Marcelo Alvarez, presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), en diálogo con Télam.
«Fue una muy buena decisión», afirmó Alvarez, y estimó que -en términos económicos- la minería generará ingresos al país por exportaciones «por más de u$s 3500 millones de dólares en 2016», según las cifras extraoficiales y provisorias de la Cámara que lidera.
El directivo minero realizó una evaluación de la decisión del Gobierno nacional de reducir a cero los derechos de exportación para la actividad, un decreto próximo a cumplir seis meses de vigencia.
«Ese gravamen no existe en ningún país del mundo, y su imposición, hace apenas unos años, fue ruinoso para la minería y para el país», criticó.
Ponderó, luego, el reciente anuncio realizado por empresas que integran la CAEM, realizado el Día de la Minería, cuando se anticiparon inversiones por 20.000 millones de dólares para el período 2016/21.
«Esa decisión sería impensable sin el cambio de régimen», dijo Alvarez.
El directivo de CAEM, y de la compañía Gold Corp, valoró -además- el impacto social de la quita de retenciones en relación con el mercado laboral.
«La minería genera ocupación para 90.000 trabajadores argentinos, entre empleo directo e indirecto», afirmó.
La decisión oficial de eliminar retenciones generó mejoras competitivas y reactivación en proyectos y zonas tan diversas como Bajo de la Alumbrera (Catamarca), Triton (Santa Cruz), y Sierra Grande (Río Negro), con lo cual permitió – en parte- revitalizar las economías regionales.
En este mismo sentido se pronunció Jaime Bergé, presidente de la Cámara Minera de San Juan, quien sostuvo que «la quita de retenciones puso al proyecto Casposo nuevamente en funcionamiento, pero también mejoró la producción de las minas Veladero y Gualcamayo; reactivó las exportaciones de cales a Chile y alargó la vida de las minas productivas procesando otros minerales».
A casi medio año de la puesta en marcha del Decreto 349/2016, el directivo interpretó que es un buen período de tiempo para analizar la decisión oficial y su potencial impacto en la actividad.
«Fue muy positiva», enfatizó Berge y enumeró algunos logros, sobre todo, económicos y sociales, que se obtuvieron: «aumentó la demanda de operarios y el Estado recaudará más por impuestos que lo que hubiera obtenido por las retenciones».
Durante el lanzamiento de la medida, en febrero de este año, el Gobierno Nacional justificó la decisión al señalar que «los derechos de exportación han tenido un efecto negativo sobre la industria minera argentina, lo cual ha desincentivado las inversiones».
Por su parte, desde la minera Barrick consignaron que «la quita de retenciones y la decisión de reformar ciertos aspectos fiscales, posicionan a la Argentina como un destino muy atractivo y competitivo para las inversiones y la generación de nuevos negocios».
Por su parte, el gerente de Comunicaciones de Barrick, Matías Maciel, valoró la política minera de la gestión que concluyó en Diciembre de 2015 y recordó que «ya era una actividad de importancia para el gobierno anterior».
«Las primeras medidas del nuevo gobierno indican que también se trata de una actividad de alta consideración, lo cual permite allanar el camino para llevar desarrollo social y económico a provincias con escasos recursos», dijo Maciel a Télam.
Por último, comentó que la compañía «sigue explorando oportunidades para el futuro desarrollo en la Argentina y tiene un equipo buscando nuevos recursos».
Por Ariel Rudistein