El ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, dio a conocer una carta de respuesta a la del ex secretario de Recursos Hidrocarburíferos, José Luis Sureda, en la que negó que haya habido censura en su repartición y aseguró que el funcionario renunciante no consideraba prioritarias a las energías renovables, a pesar de que su desarrollo sea una “obligación emanada de una ley”.
Seis días después de hacerse pública la carta de dimisión de Sureda, Aranguren rechazó que él haya ordenado impedir el ingreso al Palacio de Hacienda del periodista de The Wall Street Journal, Taos Turner, motivo que Sureda consideró el detonante para presentar su dimisión el 11 de abril pasado.
«Coordinar la tarea de prensa no se puede confundir con censura y desde ya repito, como lo hice personalmente el día de la renuncia del ingeniero Sureda, que no me enteré del incidente hasta que leí los términos de esa renuncia, por lo que no es cierto que de mi parte se hubiera ordenado impedir el acceso al periodista en cuestión», aseveró Aranguren en su respuesta.
«Sin perjuicio de que el entredicho se podría haber resuelto con una simple llamada telefónica, es oportuno destacar que en ningún momento se le solicitó al periodista que adelantara las preguntas que iba a formular», completó.
Asimismo, indicó que «desde ya que no considero que la libertad ajena es un bien transable (sic) que yo puedo arbitrar a mi gusto, como lamentablemente se señala en la renuncia».
«Las ideas y convicciones que proponga un secretario de Recursos Hidrocarburíferos deben ser el resultado del equipo que él mismo dirige o coordina. Ese es el primer trabajo en equipo que debe evaluarse. Por otra parte, esa Secretaría, integraba otro equipo, el del Ministerio de Energía y Minería que coordino y dirijo, en donde estoy secundado por cuatro secretarios y dos subsecretarios, y en el que las convicciones e ideas de cada uno de ellos también deben armonizarse para alcanzar un resultado conjunto del cual soy primariamente responsable», señaló Aranguren.
El titular de Energía agregó que integra «también otro equipo, el del gabinete de ministros, coordinado justamente por un ministro coordinador y dirigido por el Presidente de la República. Por lo tanto es esperable que las ideas y objetivos de un Ministerio deban ajustarse a otros objetivos superiores, que tengan en cuenta no solamente las necesidades del largo plazo, sino también las de la coyuntura».
«No aceptar esta adaptación extra muros, tal el término usado por el ingeniero Sureda en su renuncia, sería, eso sí, una clara expresión de autoritarismo y no comprender que siempre habrá un puente que transitar entre lo técnicamente deseable y lo políticamente posible», añadió. Respecto de lo que Aranguren consideró «el fondo de la cuestión», aseguró que para Sureda «no se puede desarrollar Vaca Muerta y las energías renovables al mismo tiempo y el país debe apostar fuertemente al desarrollo de la primera».
«Esa seguramente sea su convicción, posiblemente producto de décadas de trabajar en el sector petrolero», planteó, al tiempo que expresó su discrepancia indicando que «no hay tal opción».