La visita del presidente de Bolivia, Evo Morales, dejó más que la inauguración de la estatua de Juana Azurduy frente a la Casa de Gobierno.
Entre los acuerdos firmados para reforzar los lazos comerciales entre las naciones, Evo se llevó bajo el brazo un proyecto para el desarrollo de un reactor nuclear multipropósito que le entregó el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido.
Argentina le compra gas a Bolivia. Como contrapartida, Bolivia le podría comprar el reactor.
El diseño y producción estará a cargo del Instituto de Investigaciones Aplicadas (Invap) y la Comisión Nacional de Energía Nuclear (CNEA). Se trataría de una exportación de tecnología de no menos de u$s 250 millones, según publicó El Cronista.
Ayer a la mañana, y tras recibir el plan de aporte argentino a la «ciudadela nuclear» que planea Evo en una locación cercana a la ciudad de La Paz, el mandatario visitó, junto a De Vido, la central nuclear Néstor Kirchner (Atucha 2), en Zárate, provincia de Buenos Aires. Al respecto, el presidente boliviano destacó que «es una obra admirable» y agregó: «venimos con muchos deseos de replicarlo en Bolivia».
En mayo de 2013, De vido se reunió en Bolivia con el vicepresidente Álvaro García Linera, y ambos manifestaron su interés en un plan de cooperación nuclear. Allí se acordó que el Invap iba a desarrollar una propuesta para ofrecerle a Bolivia su modelo de reactor nuclear multipropósito, que servirá con fines de capacitación y para el desarrollo de medicina nuclear, no así para energía.
El próximo paso será un viaje de De Vido a Bolivia, a fines de agosto, para avanzar con el programa.