En distintas áreas de la provincia gobernada por Jorge Capitanich se detectaron indicios de cerio y tantalio, dos insumos cada vez más demandados por la industria tecnológica moderna.
Con el aval del Gobierno provincial, científicos y especialistas en minería e hidrología acaban de presentar un informe preliminar que abriga esperanzas de hallar “minerales raros” dentro del territorio chaqueño. El trabajo detectó indicios de “elementos anómalos” como el cerio y el tantalio, dos recursos altamente valorados por sus aplicaciones en la industria tecnológica moderna.
A fin de analizar los resultados del relevamiento, el secretario de Minería, Jorge Mayoral, se reunió recientemente con el gobernador Jorge Capitanich, quien confirmó la continuidad y profundización de los análisis para confirmar la factibilidad de la explotación comercial de estas “tierras raras”.
Así lo informó a este medio Omar Judis, ministro provincial de Infraestructura, quien participó del encuentro, al que también asistieron los expertos Francisco Nullo, María Siedlarewistch y Santiago Nullo, responsables de las investigaciones. “Lo hecho hasta ahora constituye una primera aproximación. Somos optimistas con respecto a las conclusiones que puedan sacarse en próximos estudios”, aseguró el funcionario.
Mayoral, por su parte, sostuvo que en adelante se evaluarán con mayor precisión los sitios más propicios y las mejores secuencias de trabajo a realizar. “No se trata solamente de relevar la información existente, sino también de producir nueva información que permita cuantificar el potencial del Chaco en este rubro”, señaló.
Según sus palabras, ya fueron analizadas más de 100 muestras pertenecientes a 6 áreas de la provincia, de las cuales quedaron seleccionadas 3 para continuar con las labores. “En esas tres áreas, los valores obtenidos llamaron positivamente la atención, por lo que las posibilidades de dar con ‘minerales raros’ son concretas”, añadió.
Ilusión santiagueña
Al igual que Chaco, Santiago del Estero quiere dar sus primeros pasos en una actividad que históricamente le ha sido ajena de la mano de los “minerales raros”. En esa provincia, Gaia Energy Argentina, filial de la uranífera canadiense U308 Corporation, está buscando dicha clase de recursos en la zona de Jacimampá, en las inmediaciones de Sumampa, al sudoeste santiagueño.
“Estamos trabajando en una cadena montañosa de la era Paleozoica, donde se han manifestado indicios de la posible presencia de ‘tierras raras’. Ya hicimos una geofísica aérea mediante la cual hallamos anomalías magnéticas en el área, y también contamos con informes y datos al respecto, que fueron obtenidos en décadas pasadas por firmas privadas y entidades públicas”, sintetizó Carlos Cuburu, gerente de Relaciones con la Comunidad de Gaia.
Sin considerar la serie de los actínidos, los “minerales de tierras raras” son 17: el escandio, el itrio y los 15 elementos del grupo de los lantánidos (lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio, samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio).
Usados en la mayoría de los dispositivos electrónicos de última generación (incluidos los televisores de pantalla plana, los teléfonos inteligentes y los automóviles híbridos), poseen valiosas propiedades magnéticas y conductivas. Actualmente, la mayor parte de las reservas de “minerales raros” conocidas a nivel global se encuentra en China. ›|‹