Chevron abandona los yacimientos de Río Negro y sólo trabaja en Loma Campana

La filial argentina del gigante norteamericano Chevron acordó la salida de sus activos en Río Negro que, desde hace un par de años, mantenía en una suerte de stand by. Con este movimiento la presencia de la petrolera en el país se redujo a la operación del maduro yacimiento El Trapial en Neuquén y a la sociedad con YPF, a través de su casa matriz, en el principal desarrollo en Vaca Muerta: Loma Campana.
El secretario de Energía rionegrino, Sebastián Caldiero, confirmó la venta del bloque Estancia Vieja-Puesto Flores, ubicado en la zona norte de Roca, que pasará a manos de President Energy subsidiaria local de la compañía inglesa President Petroleum.
Allí Chevron era propietaria del 100% del bloque. Desde la firma ratificaron el acuerdo y señalaron que las negociaciones se cerraron el 20 de septiembre pasado. Sin embargo se optó por no hacer comentarios sobre el valor de la transacción.
Tras la venta, la nueva propietaria del área, un bloque maduro con producción de crudo, acordó la renegociación de la concesión con la secretaría de Energía provincial. El acuerdo será ratificado por el gobernador Alberto Weretilneck y enviado a la Legislatura para su aprobación definitiva. La administración provincial espera que la todo esté cerrado antes de fin de año.
President Energy, una firma con activos en Salta, desembolsará una inversión en exploración y explotación de 342 millones de dólares hasta finalizar la concesión. Además acordó pagar un bono al Estado provincial de 22 millones de dólares, equivalente a unos 370 millones de pesos..
El pago cerrado es uno de los más altos, proporcionalmente, que consiguió la provincia. Si bien la Ley de Hidrocarburos 27.007 establece una fórmula para su cálculo, esto sólo sirve de base. En este caso los técnicos rionegrinos introdujeron nuevas variables que terminaron por engrosar la cifra.
Además la nueva concesionaria aceptó el ingreso de la petrolera provincial Edhipsa con un 10% de participación bajo el método que se conoce como “carry” (acarreo) y que fue popularizado por la firma estatal neuquina GyP. De esta manera toma ganancias hasta el porcentaje acordado y paga sus inversiones con el 50% de la producción que le corresponde.
Chevron además operaba y tenía participación en las áreas La Yesera y Loma Negra. Su parte fue negociada con la petrolera Capex, con activos petroleros y en generación eléctrica, que por estas horas resuelve con YPF, la socia mayoritaria de los bloques, quién conducirá la operación. Allí también están presentes Corporación Financiera Internacional y Metro Holding.
Si bien desde Chevron prefirieron no hacer comentarios sobre las áreas La Yesera y Loma Negra, su venta es un hecho en la industria petrolera y también para el gobierno provincial. En el caso de estos bloques, que no están próximos a vencer su concesión, la secretaría de Energía pidió a la compradora Capex y a YPF, los que mayor porcentaje acumulan, que presenten antes de fin de año un plan de inversión.
Las compañías negocian la operación y delimitan los proyectos que buscan aplicar en cada uno de los yacimientos.
Loma Negra guarda uno de los últimos intentos fallidos de Chevron en el país. En 2013 el propio Weretilneck anunció el descubrimiento de un superpozo que años después se desinfló y terminó con una producción marginal. Sin embargo los técnicos creen que su potencial aún es importante.
Si bien no se conocieron cifras oficiales de la transacción, años atrás cuando la compañía norteamericana puso a la venta sus activos en el mercado se hablaba de un rango de entre 60 y 90 millones de dólares.

Fuente: Río Negro