Diálogo con Francisco “Paco” Pérez, gobernador de la provincia
Son los emprendimientos Hierro Indio y Cerro Amarillo, que prevén la extracción de metales al sur de la provincia. Ambas iniciativas están encuadradas en los parámetros de la Ley 7.722, que limita el uso de sustancias químicas.
Es una de las provincias con importante potencial metalífero. Su vecina más próxima, San Juan, es, de hecho, el principal referente de la industria minera a nivel nacional. Sin embargo, por cuestiones de índole política, traducidas en normas que limitaron el desarrollo de la actividad, Mendoza no se subió en los últimos años al tren de la minería. Pero el escenario parece estar modificándose. Por impulso del gobernador del distrito cuyano, Francisco “Paco” Pérez, la Dirección de Minería aprobó dos prospectos exploratorios al sur de la provincia, en las cercanías de Malargüe, que apuntan a producir hierro y cobre en el futuro.
Se trata de Hierro Indio y Cerro Amarillo, dos iniciativas que ya esperan el aval legislativo para iniciar las obras.
“Son dos proyectos de exploración para producir hierro y cobre al sur de la provincia. Ya fueron presentados en el Senado y ahora la Legislatura deberá expedirse”, precisó Pérez en diálogo con El Inversor Energético & Minero, que lo consultó a la salida de la Casa de Mendoza en Buenos Aires.
Ambas iniciativas están encuadradas en los parámetros previstos por la Ley 7.722, que limitó la actividad metalífera en la provincia al prohibir el uso de sustancias químicas. De hecho, los proyectos prevén la extracción del recurso minero, pero no su tratamiento en la provincia.
“Hoy estamos discutiendo los emprendimientos que permite la normativa vigente, en el marco de la Ley 7.722”, expresó el mandatario cuyano.
En sintonía, Marcos Zandomeni, ministro de Energía, precisó que “los proyectos deberán obtener las declaraciones de impacto ambiental emitidas por la Dirección de Protección Ambiental y la Dirección de Minería para comenzar con las operaciones de exploración”.
Mesa de diálogo
Además, afirmó que “a principio de año se conformó la Mesa de Diálogo Minero con la participación de todos los sectores (cámaras, empresarios, asociaciones) y venimos trabajando para que la industria minera tenga tres ejes: empleo, desarrollo sustentable y el control”.
Cuando Zandomeni se refirió al desarrollo de las iniciativas mineras, dijo: “Debemos discutir proyecto por proyecto que tiene un impacto muy bajo. Ahora lo hemos presentado en la Legislatura para que allí se discuta y se analice la declaración de impacto ambiental para la exploración minera”.
El proyecto Hierro Indio se ubica 55 kilómetros al suroeste de la ciudad de Malargüe. Se trata de un yacimiento de hierro que se encuentra en etapa de prospección. La inversión inicial será de u$s 1 millón y generará empleo de manera directa para unas 30 personas.
Cerro Amarillo está ubicado a 60 kilómetros en dirección oeste de la ciudad de Malargüe. Está focalizado en la tarea principal de la obtención de cobre. Se encuentra en etapa de exploración, demandará la inversión de
u$s 10 millones y empleará alrededor de 100 personas de manera directa.
La aprobación por parte de la Legislatura sólo autoriza a las empresas a las tareas de exploración. Si del resultado de las actividades de exploración surge la factibilidad para la explotación, las empresas deberán presentar un nuevo estudio de impacto ambiental que será sometido a dictámenes sectoriales. ›|‹
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“La reapertura de Vale, muy complicada”
La suspensión a principios de 2013 del megaproyecto Potasio Río Colorado, que iba a movilizar una inversión de más de u$s 6.000 millones, afectó severamente a la provincia. Es lógico: era la mayor inversión en marcha de Mendoza y también del país. Aunque señaló que le encantaría reactivar la obra, el gobernador mendocino, Francisco “Paco” Pérez, admitió: “Por ahora no veo una posible reapertura”.
“Por el momento no tengo respuesta y el escenario político de Brasil, con las elecciones presidenciales a corto plazo, tampoco ayuda”, concluyó.