La plaza accionaria sorprendió ayer al sepultar nuevamente la tendencia a tomar ganancias (natural, considerando las que acumuló en los últimos meses) y cerrar con alzas que dejaron al índice Merval en un nuevo récord de 5386 puntos.
Fue al cabo de una jornada de negocios que arrancó como una continuación del clima que se había impuesto en la segunda mitad de la rueda previa, con los inversores más bien retraídos y más propensos a vender que a comprar, pero que cambió de tono de las 14 en adelante cuando, de la mano de la fortaleza del contado con liquidación y una ola de compras interesante, los precios comenzaron a rebotar hasta cerrar con generalizadas alzas.
El foco de atención volvió a estar en el sector energético, con las eléctricas como verdaderas estrellas una vez más: +11,5% para Edenor, +7,3% para Pampa y +5% para Petrobras Energía, todas sacándole ventaja de dos a cuatro cuerpos al Merval, que cerraría 2,46% en alza. El volumen de negocios con acciones escaló hasta los $ 130 millones y hace tres meses que se mantiene sobre los 100 millones, cuando había transitado el año, hasta antes de las PASO, promediando 55/60 millones, según La Nación.
A esto hay que agregar la firmeza que volvieron a mostrar los bonos en dólares, en buena medida ayudados por el empuje del billete, que en el mercado paralelo saltó a $ 9,85, y los cupones atados a la variación del PBI, luego de que un índice que elabora la consultora de Ferreres marcara un repunte de la actividad industrial en septiembre superior al esperado y los datos de producción siderúrgica (+16,8% interanual) cimentaran buenas expectativas para los datos de actividad general que el Indec divulgará hoy. Todo redundó en alzas que fueron de 1,7 a 3,3%.