Tras la explosión fatal del jueves, el intendente de Comodoro Rivadavia, Néstor Di Pierro, confirmó que mañana por la tarde se realizará una reunión en el municipio referido al tema de la seguridad en yacimientos, entre otras cuestiones de agenda. Según anticipó, de la misma tomarán parte las operadoras, los sindicatos de la actividad y participaría además el gobernador Martín Buzzi.
Es que además de subrayar que la pasada «fue una semana muy triste para los comodorenses», enfatizó que «lo que sucedió fue en un yacimiento que ya viene cuestionado por falta de inversión desde hace mucho tiempo» y, si bien recordó que en 2013 se le había renovado una concesión, sostuvo que «hay que empezar a tomar medidas y decisiones de fondo», según consignó El Patagónico.
Además, agregó otros ejes a la discusión como el hecho de que el contrato petrolero de Sipetrol rubricado en mayo aún no está vigente porque no fue ratificado por la Legislatura, con lo que los municipios de la zona sur no perciben la renta que corresponde según la Ley Provincial de Hidrocarburos a la que se adecuó tal contrato. «Eso significa que no está la inversión comprometida y que estamos en una situación en la que no hay que mentirle a la gente» planteó.
En tanto, en la tarde de ayer Tecpetrol emitió un tercer comunicado tras la explosión que se produjo el jueves en el yacimiento El Tordillo, donde ayer se reanudaron las actividades por dos horas.
En el texto, la compañía confirmó que «el hecho ocurrió cuando se estaba realizando el reemplazo de un tramo de tubería en la planta La Petisa. De manera inmediata se activaron los procedimientos de Emergencia y de Contención de la situación, se detuvieron todas las actividades en dicha zona del yacimiento y se coordinó un paro programado de todas las operaciones en El Tordillo que se irán reanudando paulatinamente».
En el mismo comunicado, la operadora informó que Roberto Araneda y José Luis Guinao continúan internados en la unidad de terapia intensiva de la Clínica del Valle y el Hospital Regional de Comodoro Rivadavia, respectivamente, y que han seguido sus diagnósticos y evolución a través de médicos propios y especialistas.
Por otro lado, mientras se aguarda la evolución de los dos trabajadores, la empresa asegura que «un grupo especial de investigación recolecta toda la documentación referida a la instalación involucrada, a las características del trabajo realizado y la secuencia de los hechos; realizando entrevistas con los colaboradores cercanos que permitan comprender las causas del accidente».