Según consignó el vicepresidente de Upstream (operaciones de exploración y explotación de hidrocarburos) de YPF, Santiago Tanoira, “en este mismo momento estamos trabajando, estamos definiendo acciones y estimamos que de aquí a fin de año tendremos anuncios importantes para mantener informado a todo el espectro con quienes nos relacionamos, esto es accionistas, proveedores, provincias y demás, manejando un parámetro de 45 o 50 dólares el barril, dentro de un plan de mediano plazo”.
En cuanto a los mayores desafíos, se encuentra el trabajo de cómo hacer para seguir produciendo en forma segura, manejando el entorno y cumpliendo con las leyes, “lo que nos encuentra en este momento en Santa Cruz, por ejemplo, con todos los equipos de producción parados, no así los workover y los pulling –de los que tenemos 18 equipos trabajando– y básicamente eso marca las discusiones que se vienen dando en cuanto a poder lograr la competitividad necesaria para lograr una producción sustentable”.
“Estoy convencido de que Santa Cruz tiene petróleo. No es un problema de inexistencia de petróleo; creo que en Santa Cruz tenemos factores de recuperación en los reservorios, que es bajo, pero aún tenemos desarrollos de proyectos secundarios o eventualmente terciarios. Santa Cruz claramente tiene oportunidades de seguir extrayendo crudo de sus cuencas, el tema es cómo hacerlo de forma rentable. Ese es el gran desafío que tenemos hoy”, señala Tanoira.
En cuanto a la manera de lograrlo, el ingeniero explicó que “hay tres valores que construyen el costo de cualquier actividad petrolera. El primero es el costo de desarrollo; nada más ni nada menos que el costo de hacer un pozo, dividido la producción que el pozo va a tener en el tiempo. La producción es más una cuestión puramente de reservorios, lo que se convierte en el primer eslabón de la cadena de costos”.
Luego es el costo operativo y eso “es básicamente lo que cuesta llevar el petróleo desde el reservorio hasta ponerlo en un tanque para poder exportarlo o, eventualmente, llevarlo a una refinería”.
En tanto el tercer factor es “básicamente, la carga impositiva entre los que tenemos regalías o ingresos brutos, los que cargan eventualmente el costo del precio del barril. La sumatoria de esos tres puntos tiene que ser menor o igual al precio de venta y hoy estamos en negativo”.
A la consulta respecto al estado actual de la actividad en la cuenca del Golfo San Jorge, sobre el sector más austral, el Ejecutivo de YPF explicó que la misma “presenta una dificultad mayor respecto a otras cuencas argentinas y que tiene que ver con que los pozos, en promedio, producen menos que en otros lugares, con lo que partimos de una situación compleja y representa un desafío mayor en Santa Cruz, con lo que debemos bajar el costo para hacer un pozo”.
Para hacerlo, discusión que se viene teniendo desde hace más de dos meses, Tanoira destacó “el grado de madurez de los sindicatos, quienes trabajan en cómo hacer los pozos de manera más barata y uno de esos puntos es el de mejorar la productividad y mejorar eventualmente los tiempos en realizar las tareas para potenciar la rentabilidad de la cuenca”.
En esta alternativa se trabaja para firmar el acuerdo tripartito entre YPF, los gremios y la provincia, en el cual cada uno aportaría lo suyo con el fin no sólo de evitar despidos en el sector, sino también reavivar la actividad. Aseguran que se podrían subir al menos 8 equipos en una primera etapa, una vez firmado el mentado acuerdo.
Como contrapartida Santiago Tanoira afirmó que “hoy YPF está dispuesto a tener cero margen (de ganancia) para seguir sosteniendo la actividad, nosotros estamos viendo no una situación de rentabilidad sino de viabilidad, para lo que hay que replantear el negocio, y la solución no llega de un solo sector”.