La extensión total es de 269.000 hectáreas
La canadiense Blue Sky Uranium anunció los resultados positivos de sus exploraciones uraníferas en Amarillo Grande, emprendimiento que abarca una superficie de 269.000 hectáreas en el centro-este rionegrino.
Blue Sky Uranium acaba de dar a conocer un importante descubrimiento de uranio-vanadio en la provincia de Río Negro, más precisamente en el distrito uranífero de Amarillo Grande. Según el reporte, el proyecto confirma tener el potencial de ser “un proveedor líder del recurso para el creciente mercado argentino y un nuevo jugador del mercado internacional”. De acuerdo con el presidente y CEO de Blue Sky, Nikolaos Cacos, estos resultados ratifican las buenas expectativas que se tenía en la iniciativa, cuya extensión total es de 269.000 hectáreas (Has). “En el objetivo que denominamos Ivana, nuestras perforaciones permitieron definir un corredor fuertemente mineralizado que se extiende más de 2 kilómetros en dirección noreste, tiene entre 200 y 400 metros de ancho, alcanza hasta 20 metros de espesor y se encuentra abierto a la expansión al sureste y al norte”, puntualizó el ejecutivo. La mayor parte del uranio-vanadio hallado hasta ahora, apuntó, implica mineralización de carnotita comparable a la registrada en el reconocido yacimiento de Langer Heinrich, en Namibia, con altas reservas probadas y probables de mineral. “También observamos mineralización potencialmente primaria y con depósitos de tipo arenisca”, agregó. En estos momentos, indicó Cacos, la firma está emprendiendo análisis geofísicos adicionales y nuevas perforaciones para ampliar el conocimiento de Ivana. “En paralelo, estamos avanzando con las pruebas metalúrgicas”, subrayó. Además de Ivana, Blue Sky definió otras dos áreas principales de afloramiento en Amarillo Grande: Santa Bárbara y Anit. Con sede en Vancouver (Canadá), la empresa pertenece al Grosso Group, que en el mercado local también controla Golden Arrow Resources y Argentina Lithium Energy Corp.
Proyecto atractivo
El distrito uranífero Amarillo Grande fue identificado y explorado preliminarmente por Blue Sky entre los años 2007 y 2012. Dichos trabajos formaron parte de la estrategia del Grosso Group en aras de sumar energías alternativas a su porfolio de compañías exploradoras. Sobre la base de lo relevado, la proximidad de varios targets de gran envergadura sugiere que si los recursos son delineados podría contemplarse algún tipo de instalación de procesamiento. El área es plana, semiárida y accesible todo el año, a la par de disponer de instalaciones ferroviarias, energéticas y acceso portuario en sitios cercanos. Según las estimaciones del especialista Guillermo Pensado, Amarillo Grande permitirá una explotación activa e intensa. “Cuenta con un corredor de 140 kilómetros de mineralización de uranio cercano a la superficie, lixiviable y con una gran potencialidad económica”, explicó. A su criterio, el modelo productivo del proyecto es sumamente atractivo, dado que las areniscas y conglomerados están en superficie, con una mineralización uranífera débilmente cementada, lo que da cuenta de un potencial minado de bajo costo. “Estudios metalúrgicos preliminares reflejan que el uranio podría ser pre-concentrado por un simple y económico lavado, lo que significaría reducir costos de tratamiento en planta de concentrado”, anticipó. ›|‹