Las reservas de petróleo de los Estados Unidos disminuyeron la semana pasada en 2,6 millones de barriles y se situaron en 483,2 millones, informó hoy el Departamento de Energía.
Tras la difusión de estos datos, el precio del barril de petróleo West Texas (WTI) para entrega en enero bajaba 0,49 dólares y se situaba en 52,49 dólares, consignó la agencia de noticias EFE, y remarcó que la cifra supera las previsiones de los analistas, que habían previsto una caída de 1,7 millones de barriles.
Las importaciones diarias de crudo alcanzaron en la semana que terminó el 9 de diciembre un promedio de 7,8 millones de barriles diarios, con un descenso de 900.000 barriles respecto de la semana precedente.
El promedio de las últimas cuatro semanas en las importaciones de crudo bajó hasta los 7,2 millones de barriles diarios, 2,6 % por debajo del nivel de hace un año.
Las reservas de combustibles para automóviles subieron en 0,5 millones de barriles hasta los 230 millones, y se encuentran en la banda más alta del promedio histórico.
Por otro lado, las reservas de combustibles destilados, como el diesel y gasóleo de calefacción, decrecieron en 0,8 millones de barriles hasta los 155,9 millones de barriles.
Las refinerías operaron a un 90,5 % de su capacidad instalada, por encima del 90,4 % de la semana anterior, indicó EFE.
Por último, las reservas totales de petróleo, incluida las de la Reserva Estratégica que permaneció estable en 695,1 millones de barriles, se redujeron en 2 millones de barriles hasta los 2.035,7 millones de barriles.
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