La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció ayer la firma de los contratos para la construcción de los tres tramos correspondientes a la primera etapa del Gasoducto del Nordeste. El primer tramo quedó a cargo de Servicios Vertúa, el segundo lo construirá la UTE Techint-Panedile y el tercero la UTE Contreras Hermanos-Helport-CPC-Rovella Carranza. Los tres tramos suman 798 kilómetros de cañerías que serán provistos por la firma SIAT SA de Techint. La inversión total de esta etapa será de 4930 millones de pesos. Además, se llamó a licitación para los tres tramos de la segunda etapa que atravesará las provincias de Formosa, Chaco y Santa Fe, y demandará una inversión de 11.947 millones de pesos. En conjunto, la obra prevé cuatro etapas y el objetivo es llevar gas natural proveniente de Bolivia a 3,5 millones de habitantes de las provincias de Salta, Formosa, Chaco, norte de Santa Fe, Corrientes y Misiones. Estas últimas cuatro en la actualidad se abastecen de gas envasado en garrafa. “Estamos haciendo una obra de carácter estructural”, aseguró la Presidenta, quien además remarcó que la iniciativa es posible porque antes construyeron el gasoducto Juana Azurduy, que trae el gas de Bolivia, consignó Página 12.
El Gasoducto del Nordeste tiene una larga historia. El primer convenio para su construcción se firmó el 24 de noviembre de 2003. Fue una iniciativa de Techint, que luego adoptó el Estado argentino. De hecho, el acuerdo lo rubricaron inicialmente el Ministerio de Planificación, siete provincias y la propia Techint. En ese momento, Paolo Rocca, titular del holding, aseguró que la obra se completaría en 28 meses, pero nunca comenzó. La última postergación se produjo en 2012. En febrero de ese año, la empresa estatal Enarsa aprobó el llamado a licitación para la contratación de la ingeniería, provisión de materiales y construcción. El 26 de junio se realizó la apertura de sobres y una de las cuatro ofertas era de Techint. Entonces, la petrolera estatal le solicitó a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) que se expidiera sobre un supuesto caso de abuso de posición dominante proveniente de la vinculación entre Techint y el proveedor nacional de las cañerías, otra firma del grupo. A raíz de ello, la CNDC emitió un dictamen donde recomendó realizar un nuevo llamado para la construcción del gasoducto, separando la compra de caños de la obra civil, para evitar así prácticas anticompetitivas. Enarsa tomó en cuenta el dictamen y el 12 de diciembre de 2012 anuló el concurso y realizó una nueva convocatoria.
La construcción del gasoducto se realizará en cuatro etapas, de las cuales la primera es la que comenzará ahora a partir de los contratos que ayer firmó el ministro de Planificación, Julio De Vido. La misma está dividida en tres tramos. El primero, de 230 kilómetros, va desde el gasoducto internacional Juana Azurduy hasta el límite entre Salta y Formosa. El segundo atraviesa 303 kilómetros de la provincia de Formosa, partiendo del límite provincial con Salta; mientras que el tercer tramo son los 265 kilómetros que se construirán en Santa Fe. En total beneficiará a 120 mil personas de 23 localidades.