El gobierno de San Luis salió al cruce hoy de informaciones difundidas por la minera australiana Latin Resources sobre un “mapeo geológico detallado” y el muestreo de la mina Géminis -que arrojaron indicios alentadores sobre la existencia de litio- y negó que la empresa tenga autorización legal para hacer esos estudios.
La empresa reportó la semana pasada en su sede de West Leederville, Western Australia, datos favorables referidos a una concesión de 12 hectáreas, ubicada a unos ocho kilómetros al sureste de la localidad de San Francisco del Monte de Oro.
Sin embargo, el gobierno provincial aclaró que no se emitieron autorizaciones para el estudio del terreno o la extracción de minerales.
“Nos enteramos por notas que salieron en los medios y eso nos puso en alerta”, señaló a la prensa provincial Eugenia Cantaloube, jefa del Programa Industria y Agroindustria, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción, quien agregó que se enviaron inspectores para examinar la zona.
“Si se constata que se ha realizado el muestreo, estaríamos ante un incumplimiento de las normativas que imponen tanto el Código Minero nacional como el Código de Procedimiento Minero a nivel provincia, que establecen etapas del proceso, tanto para la exploración como para la explotación del suelo”, sostuvo.
Cantaloube recordó que el Plan Maestro Ambiental (Ley 749-2010, conocida como Tratado de Paz entre Progreso y Medio Ambiente) propicia el crecimiento de las zonas mineras, pero de manera sustentable y con el resguardo de los recursos naturales.
El director general de Latin Resources, Chris Gale, había considerado que existe “una oportunidad fantástica para desarrollar un recurso rápidamente, en una mina a cielo abierto potencial».
La compañía indicó que los relevamientos en San Luis comenzaron una vez que se firmó con el gobierno provincial una carta de intención vinculante, el 8 de agosto pasado, y se expandieron luego a la concesión de exploración Don Gregorio, de 388 hectáreas.
En referencia a la explotación del mineral, Cantaloube dijo que “al igual que con el cuarzo y el feldespato, su extracción no genera contaminación, pero sí un impacto porque erosiona el suelo. Ahora, cuando se procesa, sí puede llegar a haber contaminación, depende del método que se emplee”.
La funcionaria explicó que la empresa se acercó al gobierno para hacer algunos requerimientos, pero no se les dio autorización para el mapeo y muestreo que habrían realizado, y aseguró que sólo tienen concesión sobre las minas Géminis y Don Gregorio, aunque no sobre el resto de las cuatro hectáreas circundantes.
La jefa del Subprograma de Control y Fiscalización Ambiental, María Julia Veinticinco, agregó que la compañía tampoco presentó el estudio de impacto ambiental que exige la ley provincial.
“Es por eso que se decidió enviar a geólogos e ingenieros en minas para verificar si se tomaron las muestras; además, como no entregaron ninguna documentación, no podemos saber qué metodología de explotación estarían usando”, advirtió.
Por lo pronto, técnicos de la cartera ambiental visitaron la zona para realizar una exhaustiva inspección y determinar el estado de situación, según reportó la Agencia de Noticias San Luis.
“Observamos antiguos acopios de cuarzo, pero se corroboró que no ha habido extracción minera y que el lugar se encuentra en la misma situación que la constatada en inspecciones anteriores y no se hallaron rastros de maquinaria ni residuos de ningún tipo”, informaron desde el Programa Fiscalización y Control.
El gobierno provincial decretó en la mina Géminis el cese de actividades en abril de 2016 por incumplimiento de la normativa ambiental, mientras que la mina Don Gregorio no presentó ningún estudio ambiental ante las autoridades de la cartera medioambiental para desarrollar actividades mineras.