A sólo cinco días de haberlo creado legalmente, el Gobierno aprobó ayer el primer sustento económico para el Fondo Argentino de Hidrocarburos (FAH), el nuevo mecanismo ideado para apuntalar el plan de inversiones de YPF con recursos estatales. Por la vía de una modificación presupuestaria, la Jefatura de Gabinete le otorgó al flamante fondo $ 1.500 millones iniciales que salieron de las partidas que habían sido asignadas al Ministerio de Planificación de Julio De Vido. Con esos recursos, ahora la cartera de Economía podrá constituir el fideicomiso en el Banco Nación y comenzar a financiar parte de los emprendimientos de la petrolera que conduce Miguel Galuccio. El FAH –que fue creado la semana pasada– está habilitado para “otorgar préstamos y efectuar aportes de capital a las empresas hidrocarburíferas en las cuales el Estado tenga participación accionaria y el ejercicio de los derechos económicos y políticos”. Los recursos –que podran llegar hasta un máximo de US$ 2.000 millones – deberán usarse para el financiamiento de “proyectos de exploración, explotación, industrialización y comercialización de hidrocarburos”. Si bien ENARSA está en condiciones de acceder a esos aportes, todo indica que la principal y casi única beneficiaria del fondo será la petrolera YPF que hasta ahora tiene bloqueado el acceso al financiamiento externo. Pese a que la norma que dio origen al fondo no especifica de dónde saldrán los recursos, los analistas del sector de energético consideran que lo más probable es que se utilicen parte de las reservas del Banco Central que quedarán disponibles al no tener que pagar este año el cupón 2012 de los bonos de deuda atados al crecimiento del PBI, según consignó Clarín. Ese desembolso corre solo cuando la economía nacional crece arriba del 3,2%. Como esa situación que no se dio el año pasado, ahora el Gobierno contaría con casi US$ 3.300 millones de reservas “remanentes” que según el Presupuesto 2013 puede derivar a gastos de capital.
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