En enero pasado, en plena crisis financiera, el grupo Pescarmona le solicitó al Tribunal de Tasación de la Nación, que pusiera en valor varios de sus activos, inmuebles y maquinaria y una de las plantas propiedad de Impsa, la sociedad mediante la cual el holding mendocino opera en el negocio de la energía eléctrica en la Argentina y en el exterior.
Si bien, el conglomerado mendocino no especificó el objetivo del pedido al organismo que depende del Ministerio de Planificación Federal, a cargo de Julio De Vido, los problemas económicos y el default en el que cayó el año pasado hacen pensar en que estaría preparando una posible venta de algunos de sus activos para paliar parte de esas vicisitudes económico-financieras que viene padeciendo.
Por lo menos así lo aseguran fuentes del sector cercanas al empresario Enrique Pescarmona y a las firmas que están a cargo del proceso de reestructuración de la deuda por cerca de u$s 1200 millones que posee Impsa.
Tal como anticipó El Cronista, la semana pasada, el holding ya propuso un plan para salir del default al que ingresó hace siete meses. Esa propuesta ahora está siendo analizada por sus acreedores. La oferta incluye una mezcla de canje de deuda por bonos Par y Discount; la emisión de una serie de Obligaciones Negociables; Warrants y hasta la cesión de una parte de su capital accionario que llegaría al 25% de la compañía.
A esto ahora le podría sumar una eventual venta de inmuebles, galpones, plantas de producción y máquinas anexas de la sociedad. También de instalaciones, instrumental y máquinas de la Planta II, ubicada en la localidad mendocina de Godoy Cruz. Este establecimiento se especializa en la producción de equipamiento clave de las centrales hidroeléctricas y torres para turbinas eólicas.
«Se trata de maquinaria e instalaciones complementarias de una empresa líder en la industria metalmecánica argentina con desarrollo tecnológico de nivel mundial, cuya capacidad de producción se sustenta en la calidad y complejidad de los equipos que se detallan», asegura el informe del Tribunal de Tasación de la Nación, al que tuvo acceso El Cronista.