El ministro de Planificación, Julio De Vido , negó en un comunicado que hayan existido irregularidades en la importación de gas licuado y criticó el operativo ordenado por el juez Claudio Bonadio en su cartera. «Los concursos se realizaron en forma pública, transparente y en el marco de las normas vigentes y tuvieron el objetivo claro de garantizar el suministro de gas en nuestro país», señaló el comunicado del ministerio a su cargo, ante las observaciones formuladas en la denuncia. Advirtió, además, que la documentación requerida por el juez «hubiera sido remitida sin necesidad de tal intimación ni de dicha fuerza en un marco de sobreactuación, que solo busca plantear la operación mediática». Según La Nación, De Vido consideró sugestivo que luego de casi un año de realizada la denuncia, la medida judicial se hubiera llevado adelante «en la víspera electoral, sin que se haya solicitado antes ningún tipo de documentación al ministerio por medio de oficios o pedidos de remisión de información». Ante los cuestionamientos planteados a su cartera, De Vido recordó que «en la década neoliberal se implementaron políticas energéticas que dilapidaron y entregaron nuestro gas, exportándolo a precio vil sin reservas justificadas». Explicó que «a partir del incremento explosivo de la demanda producto del modelo de crecimiento, desarrollo e inclusión iniciado en 2003, el Estado nacional debió implementar un proceso de compras de gas natural licuado para garantizar el suministro de hogares e industrias y apuntalar el crecimiento de la economía, que fue completamente transparente, público y cristalino».