El oro bajó y cerró con su primera pérdida mensual de este año debido a que las insinuaciones de bancos centrales de que se acerca el fin de la era de la política monetaria expansiva provocaban un alza de los rendimientos de los bonos.
Si bien acumuló un alza del 7,9% en el primer semestre del 2017, el precio del oro se ha estancado en el segundo trimestre tras un sólido inicio de año, y presenta pocos cambios respecto del nivel en que finalizó marzo.
En la rueda, el oro perdió un 0,2% a u$s 1.242,30 la onza. De este modo, el metal cayó un 2,4% en junio y en el trimestre el retroceso está cerca del 0,6%. En tanto, durante esta semana acumuló un caída del 1%.
Comentarios de los bancos centrales de la zona euro, de Reino Unido y de Canadá esta semana indicaron que probablemente pondrán fin a los programas de alivio cuantitativo establecidos tras la crisis financiera, lo que llevaría a una normalización gradual de las tasas de interés.
Mientras el Banco Central Europeo sigue siendo cauto respecto de un ajuste de la política monetaria, la tendencia se está inclinando más hacia el lado restrictivo, dijo el analista de LBBW Thorsten Proettel. «Lo más importante para el mercado de oro es que tenemos un ajuste de política monetaria en Estados Unidos y con un alza más de tasas el oro ha subido», indicó.
Los rendimientos de los bonos referenciales alemanes a 10 años tuvieron su mayor avance semanal desde fines de 2015, coronando una semana en la que los retornos en toda la zona euro han subido mientras los inversores se preparan para el fin de la era de políticas monetarias ultraexpansivas.