Se verán en Olivos tras un encuentro de funcionarios y gobernadores en el Palacio San Martín. Las obras de infraestructura, en el tope de la agenda.
El presidente Mauricio Macri recibirá este mediodía en la residencia de Olivos a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en el marco de un encuentro bilateral que tendrá el acento puesto en acordar varios aspectos del comercio internacional y acelerar las obras de infraestructura de las que depende la integración económica a través de los corredores bioceánicos.
Antes de la cumbre presidencial, tendrá lugar en el Palacio San Martín una nueva reunión de ministros de la Argentina y Chile, encabezada por la canciller Susana Malcorra y su colega trasandino, Heraldo Muñoz, y a la que confirmaron asistencia una decena de ministros nacionales. Aparte, se concretará un encuentro de gobernadores argentinos e intendentes chilenos de la frontera común.
En la cita ministerial, y haciendo gala de la presidencia rotativa del Mercosur, la Argentina planteará el armado de grupos de trabajo con la Alianza del Pacífico para facilitar el comercio en áreas determinadas, algo que Chile, al mando de su bloque regional, aprueba.
Los funcionarios también avanzarán en la coordinación y operatividad de los pasos cordilleranos y delinearán una estrategia común para los proyectos de infraestructura que se encuentran en proceso de evaluación y que requieren del financiamiento externo. Entran allí los proyectos de refuncionalización del túnel ferroviario Caracoles, en la provincia de Mendoza, que se pretende transformar para el paso de vehículos, y otros proyectos sobre la ruta nacional N 7 que demandan más de u$s 5000 millones. Se buscará el apoyo de Chile para acudir juntos a organismos multilaterales de créditos.
Por su parte, los ministros de Energía retomarán el convenio marco por el que el país importó gas chileno este año y después abordarán algunos asuntos mineros. El conflicto originado por el depósito de residuos que una companía operante en Chile hacía sobre territorio argentino será parte de las conversaciones. También se evaluará la posibilidad de atraer del lado argentino inversiones de mineras que solo operan en la montaña chilena.
Ya en Olivos, el tema preponderante será la construcción del túnel vial internacional de Agua Negra. Los presidentes pasarán revista de los avances sobre la obra que prevé conectar por medio de la cordillera de los Andes la ciudad de San Juan con el puerto de Coquimbo, donde se concentra gran parte de la productividad del vecino país.
El túnel de Agua Negra, por el que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya facilitó
u$s 40 millones, será el componente logístico principal del corredor bioceánico que conectará a la Argentina con el océano Pacífico y facilitará a Chile el tráfico hacia Porto Alegre, Brasil.
Además, se espera que los presidentes aborden los preparativos de la celebración conjunta por los 200 años del Cruce de los Andes, en 2017.
Otros temas de menor escala también formarán parte de las discusiones. En Mendoza preocupa el éxodo de argentinos que cruzan a comprar a Chile cada fin de semana largo, que provoca problemas en el paso migratorio y perjudica el comercio provincial, mientras que por el lado sanjuanino hay cierta inquietud por el ingreso de vino chileno en el mercado local, hundiendo el valor del vino a granel y afectando la situación de los productores argentinos.
Será la primera visita de trabajo de la presidenta chilena a Buenos Aires a Macri. El la vio en el Palacio de la Moneda el 4 de diciembre del año pasado y ella participó de su asunción.