La caída del precio del litio ha afectado significativamente al sector minero, pero la aparición de nuevos proyectos y la espera de un repunte en la demanda generan expectativas positivas.
El sector minero en Salta atraviesa un momento complicado debido a la caída del precio del litio, lo que llevó a una disminución significativa en la actividad de las empresas del sector. Aunque el panorama no ha cambiado mucho, la aparición del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) ha generado nuevas perspectivas para el sector.
La actividad de los proveedores locales se encuentra entre un 40% y 50% por debajo de la de años anteriores, lo que se debe en parte a la finalización de las construcciones de las tres plantas de litio de Posco, Eramine y Ganfeng. Sin embargo, se esperan nuevos proyectos que se sumarán al RIGI y otros que están a la espera del estudio de impacto ambiental, lo que podría generar un repunte en la actividad.
Entre los proyectos más destacados que están a la espera de la aprobación del impacto ambiental se encuentran el proyecto de cobre Taca Taca, el proyecto Diablillos de plata y varios proyectos de litio en Pastos Grandes y Eramine. Además, Rio Tinto tiene un mega proyecto de litio que ya ha comenzado a generar contrataciones.
La preocupación por el ingreso de empresas proveedoras foráneas sin controles adecuados sigue siendo un tema relevante. Los proveedores locales han venido sosteniendo la actividad y la mano de obra en la provincia, y es importante que se respeten los porcentajes de compre local establecidos en las declaraciones de impacto ambiental de cada minera.
En resumen, aunque el sector minero en Salta enfrenta desafíos, la aparición del RIGI y la espera de nuevos proyectos generan expectativas positivas para el futuro. Es fundamental que se respeten los porcentajes de compre local y que se promueva la participación de los proveedores locales en la actividad minera.
Fuente: eltribuno