Eduardo Elsztain, timonel de IRSA, una de las mayores desarrolladoras inmobiliarias del país, desembarcó en la minería local -un negocio que suele ser mirado de reojo por los empresarios nacionales-, con vistas a poner en producción en 2015 una mina de oro en Salta. A través Austral Gold, una compañía del grupo familiar que explota una mina en Chile, Elsztain capitalizó con 9,24 millones de dólares canadienses a la compañía Goldrock Mines, titular del proyecto Lindero, para lanzar las primeras obras de ingeniería y construcción de la mina aurífera emplazada en la Puna salteña.
Austral Gold adquirió un 15% del paquete accionario de Goldrock Mines, según una operación anunciada esta semana. La compañía del grupo Elsztain compró 11,56 millones de acciones de Goldrock a un precio individual de 0,80 dólares canadienses. En total, desembolsó 9,28 millones de dólares. La transacción, que deberá ser aprobada por la Bolsa de Comercio de Toronto, prevé que en el futuro Austral Gold podrá adquirir un porcentaje mayor de la minera canadiense, pero nunca podrá superar un 19,9% de su paquete accionario. Así lo consignó El Inversor Online.
Elsztain comentó que “esta operación marca el siguiente paso de nuestra estrategia en la creación de una compañía líder en recursos de metales preciosos en América de Sur”. “Estamos complacidos en construir fuertes lazos con Goldrock y tener acceso al imponente proyecto de Lindero ubicado en la provincia de Salta, donde tuve el privilegio de invertir en otras industrias durante décadas”, agregó el titular de IRSA, con presencia también en el sector bancario.
La construcción de Lindero demandará una inversión de US$ 155 millones. El objetivo es comenzar a explotar el yacimiento en 2015 con una planta de procesamiento de hasta 15.000 toneladas diarias de recursos mineros. Con el aporte de capital de Austral Gold se lanzará la ingeniería de detalle del emprendimiento y adelantará la contratación de maquinaria y equipos de la planta con mayor plazo de entrega.