Codelco decidió adelantarse a la Ley de Glaciares. Es que está previsto que la estatal presente los estudios pertinentes ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) para alejar las operaciones de División Andina de las zonas con presencia de glaciares.
El proyecto denominado “Adecuación de Obras Mineras DAND para Continuidad Operacional Actual” se ingresará a través de un Estudio de Impacto Ambiental (EIA), y trata de adecuaciones a la mina rajo y a su depósito de lastre, manteniendo sin variación el resto de las operaciones y procesos productivos de División Andina.
En concreto, la iniciativa mantiene en 358 hectáreas el rajo autorizado de Andina, pero redireccionando la explotación minera hacia zonas sin presencia de glaciares. Por otro lado, habilita la capacidad aprobada del depósito de lastre, adecuando su forma para no afectar glaciares de roca y reforzando sus sistemas de captación, conducción y acondicionamiento de las aguas que entran en contacto con zonas mineralizadas. Para ello se contará con una nueva planta de pasada de 600 litros por segundo a 2.350 l/s.
La iniciativa no implica aumentos de producción ni de consumo de agua, ni tampoco modifica la vida útil actual de la división. “El diseño de este estudio de Evaluación Ambiental ha considerado las variables ambientales a través de medidas efectivas para resguardar la calidad del río y los glaciares adyacentes al rajo y depósito. La aprobación de este EIA permitirá asegurar la continuidad operacional de División Andina, la mantención del empleo y su aporte actual al valle del Aconcagua y al Estado, para que los chilenos y chilenas puedan beneficiarse con los recursos naturales del país”, explican desde Codelco.
La inversión que requerirán estas obras es de unos US$250 millones y su construcción tomará 36 meses. Durante ese período se crearán 450 puestos de trabajo en promedio, se indica.
Según señalan en la estatal, esta iniciativa busca anticiparse a una eventual regulación sobre la actividad minera en glaciares, al tiempo de hacerse cargo de las inquietudes de los ambientalistas. Esto considerando que hoy hay varias iniciativas en el Congreso que abordan este tema.
El primer paso en esta dirección fue tomado por el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, a poco andar al interior de la organización, cuando en 2015 anunció la reformulación del proyecto de más de US$6.000 millones Andina 244, que incluía la afectación sobre seis glaciares.
“Diría que hay dos o tres hechos que han restringido la forma de hacer minería, un montón de políticas públicas que emergen con mucha fuerza, sobre todo la ley de glaciares, el cambio climático, la sequía del Norte, el tema de las comunidades, el tema ambiental, son situaciones relativamente nuevas, que le ponen un marco bastante más estrecho para desarrollar minería, y eso se superpone al natural envejecimiento o deterioro de los minerales”, comentó Pizarro en una entrevista con PULSO en noviembre pasado.
Si bien este proyecto que se ingresará hoy no está relacionado con la expansión que se deberá llevar adelante en Andina para asegurar su sustentabilidad a futuro, denominado Desarrollo Futuro Andina -hoy en prefactibidad- desde la estatal anuncian en su página web que para llevar adelante dicha iniciativa están apostando por “una nueva alternativa de desarrollo que equilibre la necesidad de aprovechar el mayor recurso mineral que poseemos, con un caso de negocio de menor inversión, menor tiempo de construcción y que se ajuste a la realidad del escenario medioambiental actual y de la industria”.
La división Andina, ubicada en la V región, tiene el 38% de los recursos mineros de Codelco.
Fuente: Pulso