Estados Unidos anuncia un oleoducto con México que “irá por debajo del muro”.

Estados Unidos anuncia un oleoducto con México que “irá por debajo del muro”

Estados Unidos anuncia un oleoducto con México que “irá por debajo del muro”

Cualquier momento es bueno para hablar del muro con México y humillar un poco al país vecino. Ese principio parece guiar a Donald Trump en los últimos días. En Iowa, el presidente estadounidense apostó por levantar un “muro solar que produzca energía y se pague solo” y que, alegó, beneficiará a México porque “tendrá que pagar mucho menos” por la barrera.
Y aprovechó el anuncio de la construcción de un oleoducto entre EE UU y México para, con sorna, volver a hablar del muro fronterizo, que simbolizó los insultos del republicano al vecino del sur desde el primer día de su campaña electoral.
«Mi Administración acaba de aprobar la construcción de un oleoducto hacia México, que impulsará aún más las exportaciones de energía estadounidense y que irá justo por debajo del muro, ¿no? Va ir por debajo, ¿no?”, dijo en un acto sobre varias iniciativas de política energética en el Departamento de Energía.
Hubo risas y aplausos del público. Y Trump prosiguió, con burla, obviando los formalismos presidenciales y diplomáticos: “Que vaya un poco más profundo en esa sección. Ya sabes, un poco así. Justo debajo del muro”.
Trump provoca, como hacía como candidato. Pero ahora también es presidente. La casualidad quiso que casi al mismo tiempo en que el magnate inmobiliario se jactaba de su proyecto de muro con México, la diplomacia siguiera su curso y el país vecino anunciara que Trump se reunirá la próxima semana con su homólogo mexicano, Enrique Peña Nieto.
La cita, durante la cumbre del G20 en Hamburgo (Alemania), supondrá la primera entre ambos desde que Trump asumió la presidencia.
Sorprendiendo a todos, el entonces candidato republicano aceptó viajar el pasado agosto a México para reunirse con Peña Nieto.
En su quinto día como presidente, a finales de enero, Trump firmó un decreto para iniciar la construcción del muro e insistió en que lo pagaría México, algo que niega tajantemente el país latinoamericano. Eso llevó a Peña Nieto a cancelar un encuentro inminente en la Casa Blanca.
Cuando habla del muro, Trump obvia una realidad que no le favorece: los enormes escollos que afronta para financiar la barrera ante la reticencia del Congreso a aprobar los fondos necesarios.
Y lo que tampoco hizo en el Departamento de Energía fue detallar en qué consistirá el nuevo oleoducto. Parecía lo de menos. Más tarde se supo que cruzará la frontera cerca de la localidad de Peñitas, en Texas, y que permitirá transportar 108.000 barriles de petróleo al día a México.

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