La minera canadiense a cargo del proyecto metalífero salteño completó unos 61 pozos con diamantina en un total de 1.952 metros. En 44 de esas perforaciones obtuvo intercepciones mineralizadas que igualaron o superaron sus expectativas.
Fortuna Silver Mines anunció los exitosos resultados de su flamante programa de perforación infill dentro del proyecto Lindero, en la provincia de Salta.
De acuerdo con Eric Chapman, vicepresidente de Servicios Técnicos de la firma, esta campaña de perforaciones permitió mejorar la confianza en las toneladas estimadas y la ley del material planeado para el minado durante el primer año de actividad. “Las intercepciones mineralizadas igualaron o superaron nuestras expectativas en 44 de los 61 hoyos perforados en comparación con las leyes de oro estimada del modelo de bloques del año pasado”, puntualizó el directivo.
Según sus palabras, fueron particularmente positivos los resultados de los pozos ‘LDH-138’, ‘LDH-139’ y ‘LDH-164’, los cuales se encuentran asociados con la unidad de pórfido de diorita mezclada en el centro del depósito, en un área que a priori no se pensaba como mineralizada. “Estos nuevos datos se están incorporando a una estimación interna actualizada de los recursos y las reservas minerales de Lindero, con la intención de optimizar el plan de mina para capturar mejor sus beneficios. Dicha información técnica no cambiará materialmente la estimación de recursos mineros existente”, aclaró. Consistente en 61 perforaciones con diamantina en un total de 1.952 metros, el plan de perforaciones infill que acaba de ejecutar Fortuna se focalizó en las áreas planificadas para la extracción minera en el primer año, con orificios que van desde los 12 hasta los 68 metros de longitud.
A decir de Chapman, el programa se diseñó en base a tres objetivos: mejorar la estimación de las leyes en áreas mineralizadas con una menor densidad de perforación, definir con mayor precisión el contacto entre el material mineralizado y el no mineralizado tanto en la periferia del depósito como en los límites entre las unidades litológicas, y obtener muestras frescas para pruebas complementarias de columnas metalúrgicas en las reservas minerales programadas para el año inicial.
En plena fase de construcción, Lindero comenzará a operar a escala comercial a fines del tercer trimestre de 2019. De no mediar inconvenientes, el complejo alcanzará una producción de oro estimada en 137.000 onzas al cabo de sus primeros 12 meses.
Iniciativa pionera
Ubicado en la localidad de Arizaro, dentro del municipio de Tolar Grande, en el departamento salteño de Los Andes, Lindero se desarrollará entre los 3.700 y los 3.990 metros sobre el nivel del mar.
La iniciativa generará más de 600 puestos laborales y promoverá el ‘compre local’. Será, asimismo, la primera explotación metalífera a cielo abierto de Salta.
Fortuna Silver anticipó a las autoridades provinciales que la instalación del campamento demandará 18 meses de trabajo. Según lo estipulado por la ingeniería de detalle, el complejo tendrá una vida útil superior a 15 años.
La construcción y puesta en marcha del proyecto implicará una inversión mínima de u$s 239 millones. La minera con sede en Vancouver prometió llevarlo a cabo haciendo hincapié en el cuidado de la higiene y la seguridad, las cuestiones ambientales y el impacto social, además de emplear los mejores estándares y prácticas de gestión. ›|‹