Gerardo Terraz sostuvo que “La minería necesita un tipo de cambio estable y reglamentar las retenciones”

Para el secretario de Minería de Santa Cruz, la actividad minera pudo retomar entre el 60 y el 70% de su producción sin ningún caso de Covid-19. Señaló que los desafíos que plantean las empresas apuntan a la necesidad de mayor previsibilidad.

Santa Cruz, a diferencia del resto de las provincias mineras, cuenta con una gran masa de trabajadores foráneos y esto obligó, en el contexto de la pandemia del Covid-19, a las autoridades provinciales a idear protocolos específicos para la actividad, que además de tener en cuenta procedimientos para el ingreso y egreso de profesionales y técnicos a los yacimientos, debieron contemplar los que se exigen en cada uno de los distritos a los que viajan para descansar en sus turnos de franco.

La provincia de Santa Cruz tiene hoy seis minas de oro y plata en actividad.

“Tenemos seis minas de oro y plata en actividad, lo que representa el 50% de la minería metalífera del país. De a poco y a pesar del Covid-19 estamos volviendo a la normalidad, y hoy alcanzamos una producción de entre el 60 y el 70%, logramos una capacidad ocupacional de casi el 80% y ya se está recuperando toda la cadena de valor”, indicó a Santa Cruz Produce el secretario de Minería, Gerardo Terraz.

El funcionario recordó que, apenas comenzó la cuarentena, en marzo, la minería fue la primera industria en la provincia que presentó el protocolo para reactivar la labor productiva. Lo que ocurrió a partir del 2 de abril, que “se declaró como esencial (la actividad) gracias a la gestiones ante el Gobierno Nacional de la gobernadora Alicia Kirchner”.

En Santa Cruz estamos haciendo todo lo que tenemos que hacer para atraer más inversiones

En paralelo, Gerardo Terraz, anunció que desde fines de agosto cuatro empresas exploradoras junior, empezarán a realizar perforaciones -que estiman podrían demandar dos años de trabajo- en nuevas áreas del Macizo del Deseado, con una inversión de unos 12 millones de dólares.

Las nuevas exploraciones serán encaradas por la canadiense Mirasol Resources en el proyecto Virginia. La australiana Dark Horse Resources en el proyecto Cachi. La Minera Los Domos, de la también australiana E2 Metals, que avanza en el proyecto Concerrat y, por último, Latín Metals que anunció la semana anterior alentadores resultados en las búsquedas iniciadas en los proyectos Fiorentina y Fiorentina Norte.

Las empresas plantean la necesidad “de establecer reglas claras” sobre las retenciones.

“Esto nos permitirá a nosotros determinar y poner en valor la capacidad productiva que tenemos para pensar en nuevos emprendimientos” sostuvo el secretario de Minería de Santa Cruz. “Las perspectivas son buenas, los metales están en alza, el potencial que tiene el Macizo del Deseado es tenido en cuenta por los inversores y esa es muy buena señal para nosotros”, remarcó Terraz.

En relación a los desafíos que se plantean para el desarrollo minero, el secretario señaló que “todas las empresas plantean lo mismo; que falta resolver dos temas a nivel nacional que son estabilizar el tipo de cambio y reglamentar o establecer las reglas claras con el tema de las retenciones” (que si bien se establecieron en un 8% en diciembre, aún no se reglamentó la medida y se sigue aplicando un 12%).

¿Cómo puede Santa Cruz sostener la minería en tiempos de Covid-19 y a pesar de estas demandas de previsibilidad de las empresas?

Creo que desde Santa Cruz estamos haciendo todo lo que tenemos que hacer para atraer más inversiones. Las empresas nos plantean su interés en el potencial geológico de la provincia y remarcan que goza de licencia social para el desarrollo de la actividad, además de las acciones que estamos llevando en el contexto del Covid-19, cómo se aplican los protocolos por ejemplo. Pero al mismo tiempo nos consultan sobre cuestiones que faltan definir a nivel nacional. Todas las empresas plantean lo mismo. El tema de las retenciones es un punto fundamental que se debe resolver, y el otro es establecer las reglas claras con el tipo de cambio.

Hoy, cada provincia articula y se relaciona con los inversores en la medida que puede. No obstante, la Secretaría de Minería de la Nación está trabajando en una iniciativa que apunta a analizar el esquema de retenciones “proyecto por proyecto”, de hecho el titular de la cartera Alberto Hensel lo viene planteando hace mucho tiempo. Esperamos que sea factible llevarlo adelante, no sólo por las operadoras sino porque podría dar impulso a las inversiones que todavía dudan de venir a la Argentina. Eso nos pondría en una situación de mayor competitividad con respecto a Chile y a Perú.

¿Cómo se ha adaptado el sector al contexto de pandemia?

En Santa Cruz tenemos seis minas de oro y plata en actividad, lo que representa el 50% de la minería metalífera del país. De a poco y a pesar del inconveniente del Covid-19 estamos volviendo a la normalidad y hoy alcanzan una producción de entre el 60 y el 70%, se pudo lograr una capacidad ocupacional de casi el 80%. Hemos trasladado a unas 16.000 personas, en más de 200 operativos, y no hemos tenido ni un solo caso positivo de coronavirus en los yacimientos.

En el inicio de la cuarentena la minería no estaba dentro del listado de las tareas esenciales. En ese momento los yacimientos quedaron prácticamente sin gente, con guardias mínimas para controlar y garantizar las cuestiones ambientales propias de la industria. Gracias a una gestión de la gobernadora, se declaró esencial a la minería y presentamos el protocolo en el Ministerio de Salud de la provincia y comenzamos a trabajar, pusimos en funcionamiento las seis operaciones, al principio con una producción de entre el 30 y el 40%, y a la par fuimos recuperando toda la cadena de valor con las contratistas.

¿Qué particularidades se tuvieron en cuenta para diseñar los protocolos?

La minería emplea mucha mano de obra, muchos son santacruceños residentes y otro tanto provienen de otras provincias, como Jujuy o San Juan que también son mineras. Esos trabajadores que vienen de afuera cada vez que tienen que ir a trabajar o irse a descansar en su turno de franco tienen que presentar un test PCR con resultado negativo. Esas pruebas demoran al menos 24 horas y tenemos sólo tres laboratorios en la provincia que las pueden hacer.

Ante este escenario, tuvimos iniciativas como la de Newmont Cerro Negro, que invirtió en la instalación de un laboratorio propio, el primero que detecta Covid-19 en una mina, a fin de resolver gran parte de las dificultades que estamos teniendo en esta tarea que es tratar de poner en funcionamiento los yacimientos en su totalidad. Y no sólo se subsanó este problema sino que también se habilitó la posibilidad de tener, las 24 horas, con la celeridad que el caso amerita, disponible cualquier tipo de test para cualquier trabajador que presente la sintomatología.

Este tipo de acciones también abona a que nosotros podamos trabajar para afianzar la licencia social y podamos mostrarle al resto del país y al mundo que Santa Cruz es una provincia amigable para poder desarrollar minería y los inversores tomen la decisión de venir a invertir en nuestra provincia.

En el mismo sentido, la Cámara Minera de Santa Cruz (Camicruz) aportó 5 millones de pesos para la terminación de un laboratorio en el hospital zonal de Caleta Olivia, que es una localidad de ingreso a la provincia, que permite hacer los testeos de PCR no solamente para el personal minero sino para toda la localidad. De esta manera quedará en la ciudad un laboratorio con tecnología de primer nivel para el estudio de otras patologías que no sean solamente las del Covid-19.

A fines de agosto, cuatro empresas harán exploraciones en el Macizo del Deseado.

¿Qué rol ha tenido el gremio?

La Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA) tiene una participación muy grande en los protocolos y en el cumplimiento de todos los procedimientos; ellos colaboran muchísimo en la supervisión de los controles de temperatura también, y han sabido llevar adelante negociaciones con la cámara de empresarios. En tiempos de pandemia el trabajador minero de Santa Cruz puede decir que nunca dejó de cobrar el 100% de su sueldo, que goza de estabilidad laboral, que su puesto de trabajo y su continuidad laboral están garantizados, y que encima mientras otros pierden su trabajo o no tienen previsibilidad o resignan cobrar el total de su salario, han logrado un aumento del 20% a través de una negociación paritaria.

¿Tienen proyectos exploratorios en carpeta?

Logramos que cuatro empresas exploradoras junior empiecen a fines de agosto a explorar nuevas áreas en el Macizo del Deseado con una inversión de más de 12 millones de dólares. Esperamos que esto nos permita a nosotros determinar y poner en valor nuestra capacidad productiva, que va a dar la posibilidad de nuevos emprendimientos. Las perspectivas son buenas, los metales están en alza, el potencial es tenido en cuenta por los inversores y esa es muy buena señal para nosotros.

Asimismo, a fines de julio tuvimos una reunión con el presidente del Instituto de Geología y Recursos Minerales del Servicio Geológico Minero Argentino, Martín Gozalvez, y firmamos un acuerdo de colaboración para empezar a trabajar en el desarrollo de un mapa metalífero con información geológica de todo el Macizo del Deseado. En diciembre de 2021, vamos a poder mostrarle al mundo la capacidad de mineral que tenemos y el desarrollo económico que se podría producir. Fuente: La Opinión Austral

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