Intentan moderar así el freno que registró la actividad
Mientras esperan condiciones internacionales favorables para la inversión, varias gobernaciones se pusieron a trabajar para homogeneizar el marco normativo, corregir la falta de información geológica y plantearle a Nación inquietudes con respecto al tipo de cambio, la inflación y el ingreso de divisas.
Por Carlos Balboa
“Un problema para el que no se tiene solución no es realmente un problema”. El proverbio chino se ajusta perfectamente a lo que sienten los referentes mineros de las principales provincias productoras del país en cuanto a las dos grandes aflicciones que aquejan al segmento a nivel global: la depreciación de los commodities y la crisis de financiamiento. Por eso creen que, más allá de organizar misiones comerciales y estrechar lazos con inversores extranjeros, conviene concentrarse en los inconvenientes de índole local, que no son pocos. “Así combatiremos mejor la mala percepción de la realidad argentina que existe en el escenario internacional, tal como quedó demostrado en la última edición del informe del Instituto Fraser”, reconoció off the record el titular de la cartera minera de una provincia que obtuvo bajas calificaciones en la última edición de dicho reporte.
Los temas a resolver, de acuerdo con la mirada de los referentes mineros de cada provincia, que fueron consultados por El Inversor Energético & Minero, van desde cuestiones regulatorias hasta deficiencias en la información geológica, la inestabilidad del tipo de cambio y la imagen pública de la actividad.
A criterio de Daniel Ibañez, secretario ejecutivo de la Organización Federal de Estados Mineros (OFEMI) y coordinador de Asuntos Políticos e Institucionales de Jujuy, la tarea clave sigue siendo coordinar políticas en común para unificar los criterios de la actividad en toda la Argentina. “Una preocupación central pasa por consensuar una ley nacional referida al canon minero, además de promover mayores incentivos a la inversión y avanzar en materia de capacitación, entre otros desafíos”, señaló.
Para San Juan, en tanto, nada resulta más inquietante que la disminución en el ritmo de la construcción del binacional Pascua-Lama. “Confío en que el recambio de las autoridades chilenas acelerará las gestiones para retomar las obras. De todos modos, nuestra minería no se limita a lo que suceda o no con ese proyecto: estamos viendo, por caso, un interesante crecimiento del rubro no metalífero, sobre todo en cales y minerales industriales”, destacó Felipe Saavedra, ministro de Minería sanjuanino.
Es precisamente en ese ámbito donde sobresale Neuquén, que pide rever el tema de las retenciones. “Los minerales industriales representan un 72% de nuestra minería. Esperamos un crecimiento de su demanda de la mano de la industria hidrocarburífera no convencional. Pero también necesitamos que las retenciones no afecten las utilidades de las firmas que exportan estos recursos (en un 90% a Chile), ya que les está costando mucho reinvertir en actualización de maquinarias”, aseguró Carlos Portilla, director de Minería de Neuquén.
Otras preocupaciones
La reciente devaluación del peso constituye, en cierta medida, un alivio para un segmento exportador que desde hace tiempo venía quejándose del atraso del tipo de cambio. No obstante, la inflación se encuentra lejos de ser un problema solucionado. “En la industria calera, por ejemplo, un elemento básico es el carbón, que acaba de registrar una suba de un 21%. Esto indudablemente repercutirá en los costos de los productos, y de seguro también lo hará en las ventas”, detalló Noemí López, coordinadora administrativa de la Cámara Minera de San Juan (CMSJ).
De acuerdo con Joaquín Pérez, gerente general de la Cámara Minera de Santa Cruz, es cierto que se achicó la brecha entre el dólar oficial y otras referencias, como el blue, que encarecían los costos del sector. “Pero igualmente habrá que ver qué sucederá con el tema de las sustituciones de importaciones, las exportaciones, y el ingreso y egreso de divisas”, advirtió completó.
Otra asignatura pendiente de la industria en varias jurisdicciones provinciales estriba en la actualización del marco normativo. “Estamos trabajando arduamente en ese aspecto con el propósito básico de limitar la tendencia especulativa de las concesiones mineras”, afirmó Ricardo Salas, secretario de Minería de Salta.
En la misma sintonía, Gustavo Ferreyra, secretario de Minería de Río Negro, defendió el proyecto de ley de un nuevo Código de Procedimientos Mineros en su provincia. “Buscamos establecer reglas de juego claras que hoy no tenemos, aumentar la intervención del Estado para integrar a la actividad minera la matriz productiva provincial y darle una mayor tranquilidad a nuestro pueblo”, expresó.
Catamarca, por su parte, está poniendo el foco en la actualización de su información geológica (una de las mayores deficiencias a escala nacional, según el informe del Instituto Fraser). “Nuestro mapa minero prácticamente no ha sido revisado desde la década del 70. La actualización y diversificación de nuestra oferta de áreas abrirá un nuevo horizonte de posibilidades de inversión”, manifestó el secretario de Minería catamarqueño, Rodolfo Miccone.
Martín Dedeu, presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), suma otro significativo reto a sortear: mejorar la imagen del segmento frente a la opinión pública. “El presente no es sencillo, pero la riqueza minera y geológica del país está indemne y no caben dudas de que –a la corta o a la larga– veremos fructificar su potencial. Para eso, hay que seguir trabajando en términos de comunicación y capacitación”, remarcó.
Optimismo a toda prueba
Antes de viajar a Canadá para participar de la PDAC 2014, cuando todo hacía pensar que esta temporada estaría signada –tal como la anterior– por un retraimiento de las inversiones, y cuando aún estaba fresca la herida que significó la demora de megaproyectos como Pascua-Lama (a cargo de Barrick Gold) y la cancelación de Potasio Río Colorado (de Vale), el titular de la Secretaría de Minería de la Nación, Jorge Mayoral, rechazó los malos augurios y vaticinó un año positivo, “con un piso de u$s 3.580 millones invertidos, miles de nuevos empleos y cientos de oportunidades para las prestadoras de servicios”, según indicó a este medio.
Lejos de disiparse, el optimismo de Mayoral se incrementó a su vuelta de la feria internacional más importante del mundo. Con promesas de nuevos desembolsos canadienses para ampliar Veladero (por parte de Barrick) y Gualcamayo (de Yamana) y para desarrollar Cerro Moro (de Goldcorp), además de la confirmación de algunos anuncios en el medio local, el funcionario elevó las expectativas de inversión a más de u$s 3.855 millones, sobre la base de las tareas de exploración, construcción, ampliación y explotación previstas en unas 33 iniciativas a lo largo y ancho del país.
Más de la mitad de esos fondos (u$s 2.075 millones) tendrán como destino la provincia de Santa Cruz, que parece recuperar terreno a partir de la puesta en stand by del plan que impulsaba el gobernador Daniel Peralta para aumentar los impuestos que pagan las mineras según sus reservas bajo tierra. ›|‹