La minera canadiense analiza de forma positiva el cambio de la reglas de juego en la industria y apunta a seguir trabajando en el país. Para 2017 evalúa un presupuesto cercano a los 25 millones de dólares.
El Foro de Negocios e Inversiones en la Argentina continuó con la tendencia positiva con la que comenzó el año la industria minera. Es que los cambios regulatorios que produjo el Gobierno de Mauricio Macri provocan una atracción hacia nuevas inversiones.
Esas vibras parecen haber recaído en compañías del tamaño de Goldcorp, que aprovechó la envergadura del evento para confirmarle a las autoridades de la cartera de la industria su intención de seguir haciendo inversiones en el país. “Vemos este momento de forma muy positiva y queremos ayudar en todo lo que podamos. La Argentina tiene mucho potencial. Hay gente muy capacitada y los oficiales están haciendo todo para que vengamos a trabajar con ellos, por lo que es un gran lugar donde invertir”, auspició Brent Bergeron, vicepresidente Ejecutivo de Asuntos Corporativos y Sustentabilidad de la minera canadiense.
La historia de la compañía avala esa dirección. En 2010 se hizo de las acciones de Cerro Negro, al cerrar el contrato con la australiana Andean Resources, trabajó casi dos años en el estudio y comenzó inmediatamente la construcción. En plena producción en la actualidad, observa cambios importantes en el país y no sólo en minería, sino en el resto de la cadena productiva. “Vemos positivamente lo que realizamos en Santa Cruz, en una mina de clase mundial en un momento muy difícil de la provincia y del país. Ahora queremos acompañar los cambios a nivel provincial. Tenemos la responsabilidad de saber trabajar con las diferentes comunidades cercanas a la mina para generar un desarrollo sustentable para ahora y para después que la mina cierre”, afirmó Bergeron.
El compromiso con Cerro Negro es fuerte para Goldcorp. Es por eso que el siguiente paso será consolidarla como una mina de clase mundial. Para eso trabajará en algunos sitios con la productividad de la mina y verá qué tipo de exploración realizará para que crezca su inversión. “Hicimos una inversión de US$ 2.000 millones en Argentina y queremos asegurarnos de que podemos pagar por toda la infraestructura que pusimos. Esa es nuestra prioridad”, remarcó el directivo.
El planteamiento de la minera es claro: las mejoras en la capacitación para trabajadores y tecnología forman parte de un plan de que beneficia conjuntamente a la provincia y las municipalidades. Si bien busca garantizar la continuidad de los distintos proyectos, la nueva política económica ayuda a la hora de considerar otras posibles inversiones para hacer en el país.
“En todos los sitios tenemos que medir el riesgo. Sabemos que aquí hay riesgos políticos, económicos y de infraestructura. Pero problemas y circunstancias existen en todos los países. Tenemos que analizar la potencialidad de la industria y la voluntad de los funcionarios de cada país para trabajar con los inversores”, explica el ejecutivo.
Compromiso e inversiones
La voluntad en el país anfitrión en atender e impulsar los proyectos resulta esencial para la empresa. Alicia Kirchner, gobernadora de Santa Cruz, mantiene un compromiso social fuerte en ese aspecto, a entender de Bergeron. “Ella quiere asegurar primero que si hacemos minería sea de manera responsable. Y nosotros trabajamos de la misma manera. La mina tiene otros 10 o 12 años de producción, pero seguimos haciendo exploraciones ya que creemos que cuenta con más potencial y tiempo de vida. Para 2017 tenemos un presupuesto cercano a US$ 25 millones”, asegura.
En ese sentido, Goldcorp elevó su perfil en la vida sectorial, a través de la presidencia que ejerce su directivo Marcelo Álvarez en la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM). “Para nosotros fue un paso muy importante. Somos una compañía que opera en la Argentina pero a la vez tiene deseos y la responsabilidad de tratar de ayudar en el perfil del sector. Impulsarlo a Marcelo como candidato a la presidencia de CAEM fue algo muy valioso porque tenemos la posibilidad de trabajar con las autoridades y las otras compañías para que la minería tenga éxito en el país. Marcelo está haciendo un trabajo fantástico, que está siendo reconocido y nos llena de satisfacción”, expresa el directivo.
Esto forma parte de una filosofía global: en Canadá, la compañía es miembro de la Cámara de Minería nacional. Allí posee un sistema estatizado que habla de la sostenibilidad y cómo se maneja en la mina. “Poder transferir esas experiencias es algo muy valioso y lo podemos hacer a través del trabajo de CAEM para colaborar en la elevación de los estándares de calidad y en el fortalecimiento institucional de la industria”, concluyó Bergeron.