La retracción de los mercados internacionales de crédito y de algunas plazas bursátiles estratégicas, como la de Toronto, que se caracteriza por financiar los proyectos mineros, incidirá sobre el nivel de exploración en los reservorios argentinos. Así lo entiende Julio Ríos Gómez, titular de Gemera, la entidad que nuclea a las mineras exploradoras en el país.
“Los fondos de inversiones en los últimos meses no están tan dispuestos a invertir en minería y buscan otro tipo de commodities menos volátiles, en tanto que el mercado de capitales no termina de recuperarse. Por eso, el escenario mundial no es el mejor para la industria”, analizó el directivo en diálogo con El Inversor Energético & Minero.
¿Cómo describe el escenario de la minería a nivel internacional?, preguntamos al directivo.
A nivel internacional hubo una serie de vaivenes en el precio de los commodities, aunque el oro se mantuvo en niveles altos y el cobre terminó con los mismos montos que el año anterior. Incluso la plata logró recuperar su precio, después de registrar una fuerte baja. Con todo, los precios fueron bastante volátiles. Además, existe a nivel internacional un crecimiento de la inflación de los costos, lo que provoca que la rentabilidad haya bajado. Y los países con economías emergentes han desacelerado la compra de minerales, especialmente China.
Por eso, la minería mundial va a tener números que no serán tan buenos para lo que es el momento. Nuestra expectativa vuelve a centrarse hacia el segundo semestre de 2013, porque creemos que puede haber un mejoramiento en las condiciones de los commodities y en la economía mundial; eso nos va a llevar a que los inversores vuelvan a estar interesados en distintos proyectos y miren nuevamente a la Argentina.
¿Qué balance realiza de la última campaña exploratoria?
Frente al contexto internacional, que no es el mejor, tenemos que sumar también algunas medidas internas que no contribuyeron, como obligación de liquidar inmediatamente las divisas por la exportación de minerales. Por todo eso, si bien en un principio esperábamos una temporada muy buena, similar a la que habíamos tenido en 2011, nos encontramos con la realidad de que esa expectativa no se cumplió. Algunos de los proyectos avanzados frenaron un poco su inversión, otros continuaron con lo que ya estaba programado. Pero la mayoría de los programas de exploración pura se ralentizaron, salvo en algunas provincias como San Juan y Salta, que han mantenido su inversión. En Santa Cruz es donde se observa un freno más marcado.