La minería sigue siendo el motor del superávit comercial argentino

Clave para mantener los números positivos de la balanza nacional, el sector lidera la Inversión Extranjera Directa y su nivel de exportaciones está entre los más altos del país.

En virtud del decisivo aporte del sector minero, consolidado definitivamente como uno de los pilares esenciales de la economía argentina, el Gobierno nacional sobrepasó el superávit en la balanza comercial previsto para 2012.

Sobre la base de datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), la presidenta Cristina Fernández destacó en cadena nacional que el saldo provisorio de la balanza comercial se ubicó un 102% por encima del experimentado en 2011, por lo que se acumularon más de u$s 10.000 millones de superávit y se superó la meta proyectada para la temporada. “En un contexto internacional muy complicado, éste fue el resultado de una caída de las importaciones (de un 17%) mucho más pronunciada que la de las exportaciones (6%)”, explicó la mandataria.

Dos datos que acaban de divulgarse sirven para distinguir la minería como uno de los principales bastiones de este escenario superavitario. Por un lado, el último informe del Banco Central de la República Argentina (BCRA) la ubicó como el mayor destino de Inversiones Extranjeras Directas (IED) a lo largo del segundo cuatrimestre de 2012. Por otro, la consultora Abeceb confirmó que el rubro registra uno de los saldos comerciales más favorables a escala sectorial.

Para Martín Dedeu, titular de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), no es casual que el capital internacional siga apuntalando la expansión del segmento. “Las perspectivas geológicas del país son por demás atrayentes para cualquier inversor”, justificó.

A criterio de Gonzalo Dalmasso, analista sectorial de Abeceb, pese a algunas medidas políticas que incitan a la incertidumbre, la confianza de los capitales extranjeros parece mantenerse firme en actividades como la minería. “Son prueba de ello la confirmación de planes a largo plazo como los que tienen la brasileña Vale do Rio Doce y la canadiense Pan American Silver por u$s 1.430 millones y u$s 1.000 millones, respectivamente”.

Cifras positivas

Acebeb estimó que la balanza comercial de la actividad minera cierra 2012 con un saldo positivo de u$s 2.988 millones gracias al crecimiento de las exportaciones.

Impulsadas por los envíos de oro y cobre, las ventas externas alcanzan los u$s 5.429 millones; es decir, un 440% más que en 2003, cuando se exportaron productos mineros por u$s 1.004 millones. En este período, el saldo a favor de la Argentina en la ecuación importación-exportación se elevó un 543%, desde los u$s 464 millones registrados hace nueve años.

Según el BCRA, ante un panorama de menor productividad y mayor presión inflacionaria, la minería representó más de un 40% del total de las IED (que no se vieron tan afectadas por las restricciones comerciales), al tiempo que las inversiones en el segmento totalizan un crecimiento anual del 62%.

Sin tomar en cuenta los desembolsos dentro del sector minero, las IED totales en el país hubieran caído un 6,5% en lugar de subir un 33%.

Futuro promisorio

De cara al futuro, nadie más optimista que el secretario de Minería, Jorge Mayoral. “La minería será el sector productivo que más crecerá en el país durante este siglo, y estará entre los más exportadores”, afirma el funcionario cada vez que tiene oportunidad.

Sin adelantarse tanto en el tiempo, Julio Ríos Gómez, presidente del Grupo de Empresas Mineras Exploradoras de la República Argentina (GEMERA), cree que el peso de la minería en la balanza comercial nacional será aún mayor cuando se pongan en marcha los grandes proyectos metalíferos que hoy están en construcción. “Pronto tendremos el equivalente a más de dos cosechas y media de soja en cuanto al volumen de exportación y dinero que ingresará por retenciones”, pronostica.