A partir del alza en las ganancias de BHP Billiton y Rio Tinto
Si bien líderes del segmento aurífero como Barrick Gold, Kinross Gold y Goldcorp aún reportan pérdidas millonarias, gigantes como BHP Billiton y Rio Tinto experimentan un repunte que hace creer a los analistas que “lo peor ya pasó”.
Luego de que el valor bursátil de las principales mineras del planeta cayera en promedio un 44% durante los últimos tres años, el aumento en las ganancias registrado en lo que va de la temporada por los dos mayores conglomerados, BHP Billiton y Rio Tinto, sugiere el comienzo de una recuperación sectorial.
Tras confirmar un alza en sus utilidades de un 31% durante el primer bimestre del año, BHP informó que podría entregar más efectivo a sus accionistas en agosto, al divulgar sus resultados anuales. “Este recuperación no obedece simplemente a que hay mejores pronósticos económicos, sino que también se debe a nuestra propia autoayuda en materia de productividad”, justificó Andrew Mackenzie, director ejecutivo del grupo, a través de un comunicado.
En igual sentido parece evolucionar Rio Tinto, que ha mejorado sustancialmente su competitividad a través de reducciones en los gastos de capital y en los costos de operación, por un lado, y del impulso a menos proyectos de mayor retorno, por otro.
Según un informe de BMO Capital Markets, ambos grupos han empezado a balancear las caídas en los precios de los commodities. “Lo están logrando mediante optimización de costos y movimientos de monedas en los países donde operan, obteniendo así un fuerte aumento en su flujo de caja”, explicó Tony Robson, director de Investigaciones Mineras de la consultora.
De acuerdo con un reporte de Investec, lo que se observa es “un conjunto de resultados inspiradores de confianza”. “La probabilidad de que haya retornos para los accionistas de estas grandes mineras es cada vez mayor”, anticipó Albert Minassian, analista de la firma especializada.
A esto debe sumarse una tímida –pero constatable– tendencia alcista en los valores de los metales preciosos, confirmada por la remontada del índice Arca Gold de la Bolsa de Nueva York –que mide el rendimiento de las mineras auríferas–, el cual creció un 25% en lo que va de 2014, después de haber descendido más de un 55% el año pasado.
Pese a los buenos augurios previstos para esta temporada, líderes del segmento aurífero como Barrick Gold, Kinross Gold y Goldcorp vienen perdiendo –en conjunto– unos u$s 16.000 millones por año.
Asimismo, las firmas tuvieron que volver a calcular el valor de sus activos sin explotar, como consecuencia de la menor cotización del oro, lo que las llevó a reducir entre un 15% y un 33% sus estimaciones de reservas. Según los cálculos de Barrick, en 2014 su producción global caerá un 16%.
Aunque el precio internacional del oro ha crecido alrededor de un 10% en estos primeros meses del año, durante 2013 su retroceso fue de un 27%. Diversos analistas consideran, en esa dirección, que la demanda del metal precioso seguirá siendo más incierta que la de otros recursos mineros de uso industrial. Y aunque parece difícil que su valor se mantenga bajo, muchas mineras auríferas se están viendo obligadas a asumir que obtendrán menores ganancias por su producción, teniendo en cuenta que los costos no dejarán de subir. ›|‹