Litio: el “oro blanco” que ilumina el futuro del NOA

Su desarrollo representa una oportunidad histórica para la región

Cada vez más requerido en todo el mundo, es un insumo clave para las telecomunicaciones y viene ganando importancia en la industria automotriz. Su extracción y añadido de valor promete revolucionar las economías de Catamarca, Jujuy y Salta.

Entre-los-productores-top

En su forma pura, es un metal blando, el más liviano de todos. De un color blanquecino, casi plateado, resulta ideal para componer aleaciones conductoras del calor y baterías eléctricas. Ya está en el corazón de millones de teléfonos inteligentes y computadoras a lo largo y ancho del planeta. Y en los próximos años desempeñará un rol esencial en la industria automotriz. Se llama litio, pero no por nada le dicen el “oro blanco”.
En el norte del país, más precisamente en la Puna, las expectativas que despierta la búsqueda y extracción de este recurso son muy grandes. Tres son las provincias del Noroeste Argentino (NOA) que más se ilusionan con los beneficios derivados de su explotación y eventual agregado de valor: Catamarca, Jujuy y Salta.
En la primera de ellas se encuentra, según el secretario de Minería catamarqueño, Rodolfo Micone, el primer emprendimiento productor de litio del país. “Me refiero al Salar del Hombre Muerto, en Antofagasta de la Sierra, donde se extraen carbonato y cloruro de litio. Bajo mi gestión, se logró que la concesionaria llevara a cabo medidas de Responsabilidad Social Empresaria (RSE) en las comunidades aledañas al proyecto, lo que permitió fortalecer una tendencia que se impone cada vez con más fuerza: la de enlazar la actividad minera con la sociedad”, destaca el funcionario.
En la misma sintonía, resalta la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental Minero (DIA) para la iniciativa de litio y potasio Sal de Vida, donde se apostó por la metodología de la participación ciudadana. “La sociedad se involucró de lleno en pos de conocer los pormenores del proyecto”, señala.
A su entender, la clave del éxito del rubro reside justamente en que el Estado –y, a través de él, la comunidad– diga presente. “Estamos ante una oportunidad histórica para la provincia y para la región. Hoy Catamarca tiene la experiencia y la historia minera necesarias para garantizar el crecimiento de este sector”, afirma.

Planes en marcha

En Salta, en tanto, diversos proyectos de litio vienen desarrollándose de acuerdo con lo estipulado por los programas de las firmas concesionarias, que están trabajando tanto en el conocimiento de sus reservas como en el desarrollo tecnológico de los procesos a aplicar para promover la producción. Así lo asegura el secretario de Minería salteño, Ricardo Salas.
“Las empresas Eramine Suda-mérica y ADY Resources, que han construido plantas piloto móviles en sus respectivos países, ya efectuaron pruebas con salmueras enviadas desde sus yacimientos. Según lo informado, éstas han arrojado excelentes resultados, por lo que remitirán dichas plantas a sus instalaciones en la provincia”, detalla en diálogo con El Inversor Energético & Minero.
Asimismo, acota, la compañía de capitales coreanos Posco realizó ensayos exitosos en la planta piloto que instaló en el Parque Industrial de Salta. “Deben destacarse los trabajos que están implementando Rodinia en el Salar de Diablillos, Litio Minera Argentina en el Salar de Llullaillaco, Galaxy Lithium en el Salar del Hombre Muerto y Lithea-Ekeko en el Salar de Pozuelos, sin omitir que se encuentran en proceso de análisis propuestas para el desarrollo exploratorio de las concesiones del Salar de Arizaro, impulsadas por la estatal Recursos Energéticos y Mineros de Salta (REMSA)”, completa.

Investigación y desarrollo

En territorio jujeño, casi toda la atención está puesta en la actividad de Salares Caucharí y Olaroz, donde Orocobre y Toyota Tsusho –junto con la provincial Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado (Jemse)– controlan el proyecto Sales de Jujuy, mientras que Exar (de Lithium Americas) ya está realizando los primeros envíos de materia prima al exterior para su posterior industrialización.
Claro que el gran desafío pasa por fomentar el añadido de valor in situ. Con esa intención, la provincia lanzó la construcción del Centro Científico, Tecnológico y de Innovación Productiva de Palpalá, que se ocupará de todas las etapas del proceso de fabricación de baterías de litio, desde la exploración y la extracción del mineral hasta su comercialización, sin dejar de lado su valorización industrial.
La conducción del complejo, que tendrá lugar en el edificio de 4.000 metros cuadrados (m2) donde antiguamente funcionó la administración de Altos Hornos Zapla, estará a cargo del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu). Se estima que manejar toda la cadena de valor del litio equivale a multiplicar significativamente el precio del insumo. De hecho, si el kilo de carbonato de litio sin industrializar se cotiza a u$s 5, dentro de una batería de automóvil eléctrico ese mismo volumen pasa a costar u$s 25.000. ›|‹

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