Luego de haber atravesado un conflicto gremial que obligó a paralizar sus plantas cementeras, Loma Negra sale a buscar fondos que le permitan obtener la liquidez necesaria para equilibrar financiera y comercialmente sus operaciones en Argentina.
La principal productora de cemento del país con el 45% del market share total y propiedad del grupo brasileño Camargo Correa, intentará cumplir con ese objetivo a partir de un programa de compra de acciones propias por un monto de hasta $750 millones.
El plan se basa en que el grupo controlante adquiera hasta el 10% del capital que flota en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y que se encuentra repartido entre 70 inversores institucionales como Capital International Investors (1,40%); Redwood Capital Management (1,09%); Capital Research Global Investors (0,77%); Dynamo Administracao de Recursos Ltda (0,44%).
También el fondo Blackrock Inc. (0,11%); Advisory Services (0,08%); New World Fund (1,29%); o Eaton Vance Global Macro Absolute Return Advantage (0,07%), entre otros.
La operación entrará en vigencia este jueves 18 de febrero y se mantendrá por un período de 90 días teniendo en cuenta además que la compañía no tiene diferentes clases de acciones sino que cada acción ordinaria confiere al titular el derecho a un voto en una reunión por acción sobre todos los asuntos que los accionistas deberán votar.
El directorio de Loma Negra se abocará a cumplir con el procedimiento para, según informó la propia compañía a la Bolsa, «disponer eficientemente de una porción de la liquidez de la sociedad, lo cual podrá redundar en un mayor retorno de valor para los accionistas considerando el actual valor atractivo de la acción, con la posibilidad adicional de destinar una parte de las acciones adquiridas a la implementación de programas o planes específicos de compensación en acciones».
En la actualidad, el valor de mercado o market cap de Loma Negra oscila en los u$s5.900 millones y en la última ronda de cotización antes del feriado de carnaval sus acciones rondaron $179 pesos, acumulando una suba semanal del 8% desde los $166,20 del pasado lunes 8 de febrero.
En este sentido, el directorio de Loma Negra precisó el valor que piensa pagar para recomprar acciones y que llega hasta un máximo de $245 en Bolsas y Mercados Argentinos S.A. y hasta un máximo de u$s8 por American Depositary Receipt en la New York Stock Exchange.
El monto máximo a invertir será de $750 millones o el monto menor que resulte en la adquisición hasta alcanzar el 10% del capital social.
En cuanto a la cantidad máxima de acciones o porcentaje máximo sobre el capital social que será objeto de la adquisición no podrá superar, en conjunto, el límite del 10%.
Mientras que el origen de los fondos para financiar esta operación provendrá de las ganancias realizadas y líquidas según surge de los estados financieros al 30 de septiembre de 2020, «los cuales fueron aprobados en la reunión de Directorio del 10 de noviembre de 2020, dejándose constancia que la Sociedad cuenta con la liquidez necesaria para realizar las mencionadas adquisiciones sin que se afecte su solvencia».
Es que durante el período mencionado, Loma Negra reportó ganancias netas por $6.449 millones, incluyendo la venta de Yguazú Cementos en Paraguay.
De manera paralela a este plan, Loma Negra implementará nuevos programas de incentivo en acciones con el objetivo de atraer y retener a ciertos empleados jerárquicos considerados «de excepcional competencia y estratégicos» que cumplan con determinados criterios de admisibilidad, «en busca de la alineación de los intereses a largo plazo de la sociedad y sus accionistas».
El directorio contempla planes anuales individuales en virtud de los cuales se otorgarán a los empleados que resulten elegibles una cierta cantidad definida de acciones ordinarias y/o American Depositary Receipts (ADRs) en un plazo total de tres años. Las acciones necesarias para cumplir con estos planes serán adquiridos por la sociedad de conformidad con el plan de adquisición de acciones propias ya informado.
Si bien estos planes evidencian una estrategia de negocios a mediano y largo plazo de la cementera en el país, el grupo brasileño Camargo Correa no habría dejado de lado su decisión de desprenderse de la compañía, tal como ya intentó hacerlo en el 2017.
Ocurre que el mercado local y los problemas financieros que el propio holding extranjero viene acumulando forman un riesgoso combo para el futuro de la cementera que, a fines del año pasado, atravesó por una conflicto gremial con la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA), que la llevó a paralizar sus principales plantas por varias semanas. Fuente: Iprofesional.com