Los incrementos de hasta 500% que sufrirán los usuarios por la quita de subsidios al gas podrían ser mayores porque las nuevas resoluciones permitirán a las empresas hacer dos actualizaciones tarifarias anuales por inflación, previa autorización oficial.
Ocurre que, en las resoluciones emitidas para reducir los subsidios al gas, pasó desapercibida una claúsula que permite al Enargás revisar semestralmente la estructura de costos de las distribuidoras y transportadoras y autorizar aumentos por inflación.
Si se aprueban, esos incrementos se sumarán a las subas de hasta 500% que sufrirán los usuarios desde la próxima boleta, una medida que alcanza también a Metrogas, hoy controlada por YPF.
Distintas gasíferas ya anticiparon que seguirán con su histórico reclamo de aumentos tarifarios escudándose en las nuevas resoluciones porque, sostienen, las subas anunciadas fueron apenas un paliativo tras más de diez años de tarifas congeladas, según publicó Clarín.
En esa línea se habían movido antes del último aumento del gas, cuando enviaron notas al Enargas para reclamar ajustes. Una distribuidora bonaerense, por ejemplo, pidió recursos adicionales para preservar «la cadena de pagos» y la «continuidad del servicio público prestado».