El gobierno mendocino decidió despejar el camino para el desarrollo de los no convencionales. El gobernador Alfredo Cornejo firmó la semana pasada el decreto 248/18 con el que reglamentó las condiciones ambientales para la exploración y explotación shale y tight. Confían que permitirá la reactivación de una industria que, pese a su nivel actual, aporta el 20% del producto bruto geográfico de la provincia.
La expectativa está puesta en una porción de Vaca Muerta que se encuentra debajo de la localidad de Malargüe. Allí la empresa El Trébol, que formó Phoenix Global Resources junto a Andes Energía, realizó cuatro pozos exploratorios con los que obtuvo buenos resultados.
La formación no convencional en el sur de Mendoza promete una buena perspectiva de shale oil (petróleo). Creen que se trata de un crudo liviano, el que mejor precio tiene en el mercado, similar al que se extrae en Neuquén y que los yacimientos convencionales mendocinos no ofrecen.
El decreto provincial llegó luego de una masiva audiencia pública realizada el pasado 28 de diciembre en Malargüe. Pese a que las objeciones fueron rechazadas, se incorporaron al menos tres elementos novedosos en lo que será la norma ambiental: se deberán instalar sismógrafos en las locaciones para monitorear el comportamiento del suelo antes y después de la fractura hidráulica; contempla la realización de audiencias públicas dependiendo de los proyectos y; habilita la consulta a los pueblos originarios “cuando la comunidad se encuentre debidamente registrada y reconocida por el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI)”.
También obliga a la realización de estudios ambientales y establece controles semestrales, entre otros aspectos. En líneas generales no se corre de las regulaciones que otras provincias realizan en esta misma materia.
El gobierno espera que despejando los cuestionamientos ambientales, las operadoras incorporarán a sus portafolios los no convencionales mendocinos.
Fuente: gobierno de Mendoza