Los gráficos publicados por SolarPower Europe muestran cómo Europa se está quedando atrás respecto a otros lugares en lo que a instalación de energía solar se refiere. En 2016, el viejo continente apenas instaló 6,9 gigavatios de potencia fotovoltaica, mientras que el año anterior fueron 8,6 gigavatios. Un descenso del 20%.
Mientras Europa pierde ritmo, el resto del mundo, liderados por Asia y América, aprovecha para pisar el acelerador, aumentando las instalaciones de los 51,2 gigavatios en 2015 a 76,1 gigavatios en 2016.
En este sentido, Europa se está viendo eclipsada por el gran crecimiento de las empresas asiáticas tanto en producción como en instalaciones. Incluso Estados Unidos, que tiene mucha menos población que todos los países de la Unión Europea juntos, instaló casi el doble de energía solar en 2016.
Viendo los últimos acontecimientos, estas cifras no son sorprendentes. El apoyo político a las energías renovables ha estado cambiando recientemente en varios países europeos importantes y la demanda de energía solar en Asia, se ha disparado en los últimos años. Algo que podemos ver principalmente en China y Asia, donde no paramos de ver noticias de nuevos récords e instalaciones.