En una asamblea de tenedores de bonos convocada a comienzos de esta semana, Impsa, la compañía de la familia Pescarmona, obtuvo la aprobación de su oferta de reestructuración de deuda (APE, Acuerdo Preventivo Extrajudicial), con más del 80% de sus acreedores.
La centenaria firma mendocina, hoy proveedora global de equipos para energías renovables, había entrado en default en 2014 por una deuda de casi u$s 1400 millones, producto en gran medida de contratos impagos por proyectos energéticos en Venezuela y Brasil. Entre los acreedores se cuentan desde organismos de cooperación internacional como la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), hasta bancos privados y empresas.
A fines del año pasado, la firma presentó formalmente su propuesta de reestructuración, que incluía, entre otros puntos, la venta del 65% del capital de la firma, con lo que su titular, Enrique Pescarmona, perderá el control de la compañía que había fundado su abuelo en 1907.
El convenio creó la figura de un fideicomiso que contendrá el 65% de las acciones a ser vendidas por Impsa. También el holding se compromete a pagar u$s 546 millones hasta 2031 y a que los acreedores perciban u$s 221 millones de deuda «sustentable nominal» con un bono «par», a cancelar en 15 años. Y otro tipo «discount» (a una tasa menor) de u$s 225 millones, más un pago adicional de u$s 100 millones, como adelantó este diario el 21 de julio de 2016.
«Se trata de un acuerdo muy importante, ya que Impsa es la segunda empresa argentina con mayor deuda nominada en dólares, y si bien no cotiza en la bolsa local, en el mercado de bonos de Wall Street se la sigue de cerca porque lideró el lanzamiento de bonos de energías renovables en la región», comentó Sebastián Maril, analista de la consultora Research for Traders.
En tanto, desde la compañía se limitaron a emitir un comunicado destacando que «se obtuvo la aprobación de tenedores que representan el 91,7% del monto presente en las Asambleas del 21 y 22 de febrero, lo que significó un exitoso consenso». Estas reuniones convocadas judicialmente fueron presididas por Raúl Baglini, ex legislador y candidato a gobernador mendocino, y Daniel Ostropolsky, ex miembro del Consejo de la Magistratura. También estuvieron presentes el propio Enrique Pescarmona, la representante de la Comisión Nacional de Valores, Paula Ramírez y la Secretaria del Juzgado interviniente, Erica López.
El comunicado también afirmó que la empresa «continuará trabajando en formalizar las adhesiones a la Oferta de APE por parte de acreedores cuya acreencia no está representada en Obligaciones Negociables o Bonos 2020, muchos de los cuales ya expresaron su respaldo mediante la firma del Resumen de Términos y Condiciones. De confirmarse esas adhesiones se obtendría una mayoría superior al 80%».
Este avance en su proceso de reestructuración de deuda se suma a la reciente adjudicación de equipos Impsa para el reemplazo de dos turbinas en la represa de Yacyretá; y a las negociaciones con inversores adjudicatarios de las licitaciones del plan Renov.Ar para proveerles equipos de energía eólica.
Fuente: Cronista