En condiciones menos favorables, igualmente el país captará u$s 4.000 millones
Al menos desde lo estrictamente numérico, la suspensión del proyecto de Vale en Malargüe no detendrá el crecimiento del negocio minero en el país, que –según las cifras que maneja la Dirección Nacional de Minería– volverá a batir sus mejores marcas.
Para despejar las dudas surgidas tras la caída del megaproyecto Potasio Río Colorado que la brasileña Vale iba a llevar a cabo en Malargüe (Mendoza), y contrarrestar los vaticinios del fin del “boom minero” en la Argentina, la Dirección Nacional de Minería se anima a pronosticar otra temporada récord en materia de inversión y exportaciones.
En efecto, la cartera dirigida por Miguel Ángel Guerrero, que responde de manera directa al secretario de Minería Jorge Mayoral, vaticina la llegada de capitales por un valor superior a los u$s 4.000 millones y ventas al exterior por más de u$s 5.300 millones. “A fines de este 2013 esperamos sobrepasar nuestras mejores marcas en ambos ítems, lo cual no sería para nada menor si tenemos en cuenta que hoy las condiciones de mercado son otras, por un lado, y que el año pasado la actividad tuvo un desempeño excelente, por otro”, destaca Guerrero en diálogo con El Inversor Energético & Minero.
En ese sentido, el funcionario remarca que se multiplicó por ocho la inversión de riesgo en exploración con respecto a 2003. “Asimismo, se potenció la construcción de nuevos proyectos y las ampliaciones productivas con más de $ 18.700 millones, lo que implicó un incremento de un 3.356% en comparación con 2003”, puntualiza.
Según sus palabras, durante la temporada pasada alcanzó su plena capacidad productiva Casposo (en San Juan), entró en etapa final para la producción el Salar del Rincón (en Salta), comenzaron las obras en Lomada de Leiva (en Santa Cruz) y se avanzó en la construcción en Don Nicolás, Cerro Negro y Lama (en Santa Cruz los dos primeros y en San Juan el último), entre otros logros. “Además, se firmó el Acuerdo Federal Minero, se creó la Organización Federal de Estados Mineros (OFEMI), se profundizó la sustitución de importaciones mediante la Mesa de Homologación Minera y se dio un extraordinario proceso de reinversión de utilidades por parte de las empresas productoras”, enumera.
Optimismo a toda prueba
A decir de Guerrero, la producción minera llegó el año pasado a los $ 32.475 millones y el crecimiento acumulado fue de 695% desde 2003. “De este total, se exportaron $ 23.059 millones”, añade.
En cuanto al empleo directo e indirecto, sostiene que viene acumulando un crecimiento de un 412%, con más de 500.000 personas ocupadas. “En la actualidad, hay trabajo en 18 yacimientos de escala internacional, hecho histórico para el país”, comenta.
De cara al futuro inmediato, se manifiesta sumamente optimista en relación con el desarrollo metalífero, más allá de resaltar puntualmente la situación del litio. “La Argentina está liderando la inversión mundial en exploración y cuantificación de reservas de ese mineral, y es uno de sus principales productores globales junto con Chile”, sostiene.
En su opinión, para estimular el ambiente de negocios en cada provincia será fundamental el rol a desempeñar por parte de la OFEMI. “Estoy seguro de que no sólo se constituirá en una plataforma orientada a promover el diálogo y ayudar a construir consensos, sino que también velará por la uniformidad de criterios entre la legislación nacional y las provinciales en pos de una mayor previsibilidad para el inversor”, concluye. ›|‹