En los próximos días una innovadora planta de cementicios comenzará a funcionar en el Parque Industrial de Chimbas. Se trata de JLM SA, que es la firma sanjuanina que fabrica las pinturas Kolormax y las líneas Pegakol y Revestikol.
Hasta hace un tiempo este revestimiento cementicio con color se producía en Mendoza, pero gracias al aporte del Fondo Tecnológico Argentino (Fontar), cerca de $ 1,5 millones del que resultaron beneficiarios tras un proceso de selección más fondos propios, la firma pudo concretar su sueño de montar la línea en San Juan.
El producto es 100% mineral, fruto de la integración de cemento blanco, arenas de mármol, pigmentos minerales y aditivos que mejoran sus propiedades.
De esta manera lo que se obtiene es un revestimiento para la construcción todo en uno que permite ahorrar cuatro pasos: La capa de hidrófugo, revoque grueso, textura y color. Es así que con un solo producto pueden ahorrarse tiempos en los procesos de construcción y por tanto la consecuente reducción de costos. De hecho dentro del ámbito lo identifican como revoque cementicio 4C, en alusión a las cuatro capas que se integran en un mismo producto. “Hemos hecho la ampliación de un galpón para adaptarlo a nuestras necesidades y estamos montando la línea nueva con grandes estructura metálicas, mezcladoras, tolvas y embolsadoras”, contó Alejandro Mestre, titular de la firma.
A la fecha el estado de avance del proyecto está en un 70%, por lo que la proyección es que en un mes y medio la planta comience a funcionar. “Dentro de la línea 4C también podremos fabricar revoques monocapas atérmicos. Esto reduce la conductividad térmica del exterior hacia el interior de la vivienda y permite ahorro de energía, es decir ahorro en refrigeración en verano y ahorro en calefacción en invierno”, detalló Mestre, quien explicó que esta propiedad se logra gracias a la suma de granulados volcánicos combinados con cemento blanco y arenas de mármol blancas de alta pureza.
Que la planta se instale en San Juan no es un detalle menor, ya que posiciona a la provincia como pionera en cuanto a la producción de este tipo de productos, puesto que es la única firma que lo fabrica a nivel local. “Esto nos posiciona en la región, el producto ya lo veníamos produciendo pero ahora lo haremos en San Juan con mejor tecnología y por tanto con una mejor performance en cuanto a su rendimiento”, dijo un orgulloso Alejandro Mestre. Dadas las características minerales de su composición, el producto ofrece mayor durabilidad y un acabado color más que atractivo por los pigmentos que contiene.
El proyecto forma parte de los nueve que en la provincia fueron financiados por el Fontar, generados desde el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, con el fin de motorizar el aglomerado productivo industrial minero no metalífero. Es así que en marzo de este año se otorgaron cerca de $ 60 millones en financiamiento para las diferentes acciones contempladas en los proyectos, cada una con sus particularidades pero siempre con el eje en la cadena de valor minera.
En San Juan y según datos del Ministerio de Minería local, el segmento no metalífero está conformado por 346 pequeñas y medianas empresas identificadas. Se trata de un sector mayoritariamente caracterizado por limitantes tecnológicas y financieras, entre las razones por las que se apostó a este fortalecimiento.
Tras la innovación a la que apostó JLM está el objetivo de comenzar a instalar sus productos como amigables con el medio ambiente en cuanto a su aporte en la reducción de energía. El caso es la propiedad “atérmica” del producto 4C tras la combinación de minerales en su composición. “Es algo nuevo en el país y es lo que se viene, colabora con toda la situación energética en las economías familiares y reducirían los consumos de energía cuando culturalmente tengamos más incorporado el concepto de eficiencia energética en las construcciones”, destacó Mestre.
Fuente: Diario de Cuyo