El Gobierno oficializó el 11 de marzo último la creación de un subsidio a la exportación del petróleo excedente tipo Escalante que se extrae de la Cuenca de San Jorge, en Chubut y Santa Cruz. Se trata de una clase de crudo que no se puede procesar todo en el país. A través de la Resolución 21, el Ministerio de Energía que conduce Juan José Aranguren fijó hasta el 31 de diciembre de este año un subsidio de u$s 7,5 por barril, aunque lo supeditó a que «el precio de venta de referencia del marcador internacional denominado Brent no supere los u$s 47,5». Además, estableció que «se considerará que el precio alcanzado por el petróleo crudo Brent ha superado los u$s 47,5, una vez que su cotización se mantenga superior a dicho valor por el período transcurrido entre dos días de cotización anteriores y dos posteriores a la fecha del embarque del que se trate». Según Télam, así los subsidios cayeron oficialmente el 16 de mayo último, ya que el 11 del mismo mes, con un precio de u$s 47,4 el barril, fue la última vez que el valor del crudo estuvo por debajo de la cifra establecida para sostener activa la asistencia a la exportación. Ya el 12 de mayo el Brent cotizó a u$s 47,9; pero como era jueves, fue el lunes siguiente, el 16, la fecha en que dejó de pagarse el estímulo de u$s 7,5 a los embarques de crudo. Según fuentes oficiales, cuando el valor establecido de u$s 47,5 se supera, la caída de los subsidios se genera automáticamente, sin necesidad de ninguna resolución adicional. Del mismo modo, si el valor del crudo volviera a ubicarse en u$s 47,5 o por debajo de ese valor, la subvención se habilitará también mecánicamente a los dos días, sin que se requiera una expresa decisión de la cartera de Energía.