Después del conflicto que terminó con la ausencia de YPF en la licitación de ocho áreas petroleras realizada en mayo, y mientras se avanza en el acuerdo nacional para los hidrocarburos no convencionales, el Gobierno de Mendoza estudiaría la posibilidad de cambiar las condiciones de futuras licitaciones de áreas convencionales para asegurar la presencia de YPF en los procesos. Según consignó El Sol Online, tanto la Empresa Mendocina de Energía (Emesa) como el Ejecutivo apuntarían a negociar las condiciones de futuros pliegos, especialmente en lo que se refiere al cuestionado acarreo, porcentaje que cobra la empresa provincial y que molesta sobremanera al CEO de YPF, Miguel Galuccio. Al abrir los sobres “B” de la licitación que lleva adelante Emesa, y después de que quedaran disponibles dos nuevas áreas (Sierra Azul Sur-Calmuco y Cerro Manzano C) al no clasificar las sociedades que apostaron por ellas, surge la incógnita con respecto a las condiciones en que podrían volver a licitarse. En principio, la idea es abrir una nueva licitación en la segunda mitad del año con algunas áreas que quedaron libres en este proceso y también con otras que recuperaría la provincia. Sobre el futuro de éstas, el presidente de Emesa, Alejandro Neme, señaló: “Hablaremos con el ministro y con el gobernador. La intención es con algunas de estas áreas y otras que se está realizando el trámite de reversión a la provincia, y la posterior transferencia a Emesa, esperamos para el mes de octubre o noviembre a más tardar estar abriendo otro sobre A y sobre B”. En el actual proceso, sin YPF, que tendría que comenzar a definirse el próximo mes, Emesa cobró un acarreo de 10%, el cual podría modificarse para nuevos procesos en áreas de crudo convencional.