Sudamérica, con un diferencial de costos a favor
La entidad bancaria proyectó que en los próximos cinco años el valor del carbonato de litio aumentará hasta los u$s 12.000 por tonelada.
El banco de inversión británico HSBC señaló que, según sus últimas previsiones, se espera que los precios del litio hacia el final de la década se ubiquen en un rango de u$s 10.000-12.000 por tonelada. En ese sentido, señaló que la dinámica de suministro/demanda de este mineral se mantendrá relativamente estrecha al menos hasta 2020.
“La demanda del litio debería seguir teniendo un robusto crecimiento de 2,5 veces a 420.000 toneladas a 2025, impulsado por los vehículos eléctricos y aplicaciones de almacenamiento de energía. Teniendo en cuenta el aumento de los precios de litio, una plétora de proyectos están comenzando a ser explorados/anunciados. Sin embargo, podría tomar entre 4 y 5 años que la mayoría de éstos entren en funcionamiento y de manera significativa se sumen al suministro global, en nuestra opinión”, explicó la entidad en un reporte de 90 páginas elaborado exclusivamente para analizar el futuro del mercado del litio.
En este sentido, el banco detalló que, para satisfacer este fuerte aumento de la demanda, es necesario que en los próximos 10 años se pongan en marcha proyectos “de envergadura”. Se refirió a proyectos con una capacidad de 20.000-25.000 toneladas anuales, lo que ve difícil dado el bajo éxito en la exploración de este mineral.
Diferencial sudamericano
“Para la minería del litio, éste es un duro desafío, a raíz de las bajas tasas de éxito históricas y el alto número de retrasos en los proyectos. No esperamos ver otro gran déficit de litio en los próximos años, dados los nuevos proyectos en Australia y Chile”, puntualizó.
Otro aspecto que destaca la entidad bancaria en el informe es el bajo costo de producción para las empresas en Sudamérica en comparación con sus pares en China o Australia, pues según sus cifras en esta parte del planeta los costos alcanzarían los u$s 3.000-4.000 por tonelada, inferiores a los proyectos de salmuera en China (u$s 5.000 por tonelada), en Australia (u$s 6.000 por tonelada) y hard rock en China (u$s 8.000 por tonelada). ›|‹
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Posicionamiento local
El avance estatal del Gobierno de Chile a cargo de Michelle Bachelet sobre el negocio de litio –a principios de año, la presidenta confirmó que el mineral no será concesible y se considera un activo estratégico del país trasandino– alteró las expectativas del mapa regional del litio. La decisión de que Codelco, la productora estatal de cobre, ingrese al negocio del litio dentro de algunos años –está previsto que empiece a producir en 2022– modificó las expectativas de los inversores privados radicados en ese país. En concreto, frente a ese escenario, los grandes jugadores de la industria empezaron a mirar la Argentina como un mercado de oportunidades. SQM, el mayor productor de carbonato de litio del planeta, desembarcó este año en Jujuy para explorar el potencial del Salar de Caucharí. Algunos técnicos evalúan que ese campo tiene potencial para producir hasta 40.000 toneladas anuales del mineral. SQM adquirió el 50% de Minera Exar, empresa a cargo del desarrollo del proyecto Caucharí. Por esa participación pagó cerca de u$s 25 millones. Así, se asoció con Lithium Americas Corp., una empresa que cotiza en la Bolsa de Valores de Toronto, el otro titular de Minera Exar. A su vez, la empresa Rockwood, segunda en el ranking de mayores productores globales, está evaluando seguir los mismos pasos que su principal competidor. [/box][divider]