La situación en el sector petrolero local no sólo está afectada por la incertidumbre que existe en el plano internacional vinculado con el precio del crudo, sino también por las faltas de certezas dentro de la Argentina. Según consignó Tiempo Sur, las operadoras de la Cuenca del Golfo San Jorge consiguieron del Gobierno nacional un precio sostén para el crudo de exportación, sin embargo continúan con sus pretensiones de abaratar costos a partir de una reducción de sus trabajadores directos e indirectos. A su vez, las empresas que comercializan el crudo en el mercado interno sostienen que el precio sostén fijado por el Ejecutivo es, a diferencia de lo que ocurría el año pasado, “insuficiente”. A esto se suma que el mensaje del ministro de Energía, Juan José Aranguren, a principio de año fue inequívoco: el Gobierno apuesta a que los precios internos se acoplen con los valores internacionales. En este contexto, la política de precios sostén para el sector petrolero caducaría, al menos que se tome una decisión en contrario, el primero de enero de 2017. Este es el escenario que manejan tanto los funcionarios de los distintos gobiernos vinculados a las provincias petroleas como los representantes sindicales y analistas del sector. La última cotización del barril WTI para esta semana fue de 40,36 dólares. Si bien es una mejora del 29 por ciento en relación al precio registrado hace dos meses (31,53), todavía está lejos de un posible valor de equilibrio.