La recuperación de YPF dispuesta hace tres años frenó la política de desinversión que llevaba adelante la multinacional española Repsol, y permitió -según Télam- mejoras de la producción que hoy puede mostrar la petrolera, en su avance hacia un futuro autoabastecimiento energético. «Esa decisión fue muy positiva, porque rompió la dinámica de vaciamiento que tenía Repsol para la compañía, llevándola a reducir fuertemente los niveles de reservas y la producción de hidrocarburos», aseguró el economista de la Gran Makro, Agustín D’Atellis. «Que esto es positivo -remarcó- lo demuestra la recuperación que viene experimentando en estos tres años la producción de YPF y, por otra parte, no hay duda de que un recurso estratégico como ése corresponde que esté en manos del Estado». Por su parte, el director de Observatorio de la Energía, la Tecnología y la Infraestructura para el Desarrollo (Oetec), Federico Bernal, opinó que «los tres años transcurridos de gestión pública demuestran lo acertado, necesario y justo de aquella medida presidencial de recuperar YPF». En ese sentido, indicó que «el año pasado YPF volvió a repetir magnitudes económicas ascendentes en relación con 2013, incluso superándolo. Por ejemplo, los ingresos ordinarios de $ 141.942 millones aumentaron 57,5%, y la utilidad operativa de $19.742 millones se incrementó 64,3%». En cuanto a los niveles de producción, señaló que «en 2014 contra 2013, la producción de petróleo aumentó 8,9% y la de gas natural 12,5%, mientras que la incorporación de reservas comprobadas de hidrocarburos creció un 11,9%, y los volúmenes de petróleo procesados en sus refinerías fue 4,3% superior».