El programa de energía solar doméstica para puestos caprinos que inició Veladero en el año 2009, con el apoyo del equipo del área Relaciones Comunitarias que trabaja hace más de una década en Iglesia y Jáchal, ya logró instalar más de 20 paneles solares en esos departamentos cordilleranos de San Juan y pronto se sumarán otros 6 de los rincones más inhóspitos de la cordillera.
La gerente de Desarrollo Sustentable, Soledad Echagüe, consideró que “la energía es un recurso vital que nos permite llevar a cabo tareas básicas así como tareas productivas”. Teniendo en cuenta que el programa de energía solar doméstica es una de las acciones más sensibles en comunidades, Echagüe afirmó que “el desarrollo comunitario significa para nosotros la mejora en la calidad de los vecinos, dándoles herramientas que les permitan progresar”. Este programa trabaja en alianza con ACPRI – Asociación Civil de Productores Iglesianos- y en el caso de Jáchal, con la APAGJ- Asociación de Productores Agrícola-Ganaderos de Jáchal-.
La instalación de cada panel incluye: 2 módulos fotovoltaicos, 3 lámparas de 12v bajo consumo, 2 baterías Microcell MCE 200, regulador de carga, inversor, estructura soporte, caja estanca para baterías, caja plástica, llave termo magnética, disyuntor eléctrico, toma eléctrico y una jabalina de cobre. La mano de obra está comprendida en la inversión además de los accesorios menores para la puesta en marcha de los generadores fotovoltaicos en cada puesto cordillerano.
En Jáchal y por ruta 150 pasando la garganta del río Jáchal, los paneles llegarán hasta el puesto La Colonia, a 30 kilómetros de la villa cabecera. La luz podrá encenderse también en el puesto Punta del Agua de los Oberito, a 80 kilómetros de la villa cabecera. El puesto Las Pircas recibirá sus paneles solares. Éste se ubica a 45 kilómetros desde la villa cabecera.
La semana pasada se logró la entrega de paneles solares en dos puestos de La Colonia. Allí vive Alejandro César Arostica. Los puestos son de muy difícil acceso ya que desde la ruta las camionetas debieron recorrer más de 20 kilómetros por huellas que hasta los 5 kilómetros de recorrido estaban demarcadas. En adelante, un baqueano tuvo que dirigir el camino de los vehículos debido a que en algunos lugares sólo se puede recorrer a caballo.
En algunos tramos hubo que cruzar dos veces el caudaloso río Jáchal que al momento de atravesarlo, alcanzaba una profundidad de casi a los dos metros. La jornada de trabajo para este puesto comenzó a las 8 de la mañana y se extendió hasta las 16 horas. Emocionado desde que el equipo de la compañía llegó hasta que dejó el puesto iluminado, Alejandro dijo entre lágrimas que, “con esta luz ahora puedo cuidar mejor a mis animales. Voy a poder ver los nacimientos de los cabritos cuando no hay más luz solar”.
Los focos LED de 12 voltios instalados por la compañía, impedirán que los cabritos se pierdan en medio de la noche cuando hacen el destete. Para llegar al segundo puesto, de otra familia de apellido Arostica, hubo una travesía similar.
Al otro lado del río, montaña arriba, esperaba con mate y tortas fritas Cristina Arostica, mamá de 8 hijos y esposa de Ramón, quien al momento de nuestra llegada conducía a más de 200 cabras para el pastoreo de un día más de trabajo. “Hace 20 años que vivo aquí y no sabemos lo que es la luz”, dijo entre lágrimas Cristina, quien junto a su mamá, Clorinda, comenzaron a ser testigos de los primeros movimientos que iban a terminar de instalar los paneles.
Clorinda tiene 70 años y nació en ese puesto. El miércoles 30 de agosto fue el primer día en que pudo encender una lamparita led en su casa. “Desde esta noche voy a poder leerle cuentos a mi nieta Milagros, que tiene 7 años, y hacer con ella los deberes”, confesó emocionada.
Los paneles fueron ubicados estratégicamente para receptar la mayor cantidad de energía solar, que es almacenada en dos baterías de gel de libre mantenimiento, que se resguardan en un gabinete estanco metálico.
Resta instalar puestos en Iglesia como el que está previsto en Agua Escondida, Tudcum. El mismo, está ubicado por calle principal de Tudcum y se encuentra a 12 kilómetros de la villa cabecera. En Malimán, otra de las entregas ya está pactada y será en el puesto Las Tres Puntas, pasando Angualasto, siguiendo el curso por Buena Esperanza hasta pasar el río, margen este. El lugar está a 35 kilómetros desde Rodeo, Iglesia.