La empresa interestadual Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD) confirmó el cierre de la planta de refinación de oro y plata ubicada sobre calle Salta 1.127 de la Capital, donde producían lingotes de oro y granallas de plata, y se comprometieron a trasladarla al complejo minero Farallón Negro (Belén). También consignaron que reubicarán al personal (13 trabajadores) que desempeñaban sus tareas en la planta de refinación.
«Con el objetivo de garantizar la continuidad de las operaciones de refinación de metales y los puestos de trabajo, el Directorio de YMAD dispuso trasladar la planta de refinación situada en la ciudad capital de la provincia de Catamarca al complejo minero Farallón Negro y reubicar al personal que se desempeña en esa área”, aseveró la empresa minera a través de un comunicado de prensa. Fue en respuesta a la nota periodística publicada ayer por El Ancasti por el cierre de la planta de refinación, desde noviembre de 2016, y la incertidumbre que embargaba a 13 familias catamarqueñas que no tenían garantías de su continuidad laboral tras el receso estival.
La minera indicó que durante el mes de abril de 2016 YMAD obtuvo una prórroga de la Municipalidad de San Fernando del Valle de Catamarca, dado que contaba con un permiso transitorio que venció ese mes y permitía operar en el área central del distrito, con el propósito de continuar con el funcionamiento de las actividades que se desarrollan en la planta de refinación.
«El traslado de la planta de refinación es un proyecto que se viene estudiando desde hace al menos cinco años; de hecho, para ello se adquirió un predio en El Pantanillo que luego, por razones de seguridad y logística, fue desestimado como destino para la reubicación”, informaron.
Sin embargo, desde YMAD omitieron un dato. La Municipalidad de la Capital prorrogó el permiso –para la continuidad de la planta de refinación- hasta fines de 2017. Y existía un compromiso del intendente Raúl Jalil de continuar renovando la prórroga las veces que fuera necesario a los fines de garantizar la estabilidad laboral de los operarios de YMAD, tal como se venía produciendo en los últimos años.
«De acuerdo al programa de actividades y ante la falta de alternativas, el Directorio de YMAD resolvió iniciar antes de que finalice la prórroga el proceso de traslado de la planta de refinación al complejo minero industrial Farallón Negro y la consiguiente reubicación del personal profesional y técnico que allí se desempeña, con el único fin de mantener los puestos de trabajo y dar continuidad de las actividades de refinación. La decisión fue informada a la autoridad competente de la ciudad Capital, a los gremios vinculados y a cada uno de los trabajadores de la empresa”, sostuvieron.
Fuente: El Ancasti